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Consumo digital, ¿una ecuación no resuelta?
Martes, Abril 23, 2013 - 14:35

Una nueva encuesta ofrece un panorama ligeramente confuso acerca de los hábitos de consumo de bienes culturales a través de internet.

Los datos puede que no mientan, pero al menos parecen sospechosos. Contradictorios, mas bien.

De 2.500 encuestados, casi el 70% aseguró que los derechos de autor son un asunto importante y que hay que proteger las industrias creativas de la piratería; esta cifra, en 2010, era de apenas 55%.

Sin embargo, en la misma muestra de personas, más de dos tercios aseguraron que entran a los buscadores para encontrar material para descargar o para hallar la forma de subirlo.

La joya de la corona, sin embargo, es que 44% de las personas que participaron en esta encuesta (adelantada por la firma legal británica Wiggin) no considera ilegal subir material producido comercialmente a sitios para compartir información, o al menos no sabía si esta acción quebranta la ley.

Dos breves hipótesis: la primera es que una parte del público, a juzgar por la encuesta al menos, está del lado de un esquema de compartir información, algo que, per se, no los vuelve malas personas, piratas los llamaría la industria. La otra es que, en medio de la histeria normativa alrededor de la defensa y el refuerzo de los derechos de autor, los ciudadanos tienden a confundirse, a dudar ante un hecho que, al menos en apariencia, parece simple y casi natural.

Se podría añadir una tercera: la consciencia colectiva de que el creador debe ser protegido con cierta fórmula legal ha crecido. Lo que no parece resultar del todo claro son los métodos, por un lado, y si lo que se protege es la creatividad o la industria que la explota, que tienden a ser dos cosas bien diferentes.

Los resultados de este estudio, que no pretender ser representativo del universo de la red, aunque sí ofrece puntos interesantes, llegan apenas un par de meses luego de que la industria musical celebrara, por primera vez desde hace más de una década, un incremento en sus ventas.

La estadística, compilada por la Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI, por sus siglas en inglés) habla de un crecimiento global de 0,3% en las ventas de 2012.

De acuerdo con la IFPI, los ingresos digitales se convirtieron en una especie de salvavidas para el sector, tal vez el más golpeado por la entrada de la era digital, que permitió cosas como la reproducción inmediata y masiva. Las cifras compiladas por la Federación aseguran que este canal de comercialización (con modalidades como suscripción a servicios de streaming o descargas pagas) creció 9% el año pasado y hoy representa el 34% de los ingresos globales de la industria; o sea que equivalen a US$5.600 millones.

¿Qué quiere decir todo esto? Podría indicar que, con las alternativas adecuadas, con un mercado organizado y claro de opciones a precios razonables, los consumidores están dispuestos a gastar dinero en productos culturales. La otra parte del aparente discurso está en el terreno de los artistas, que también se benefician de los nuevos canales de distribución.

Este último dato lo podría confirmar el dúo francés Daft Punk, que ha roto los récords de Spotify, una de las plataformas de streaming más populares de la red. El nuevo sencillo del grupo, ‘Get lucky’, se convirtió en la canción más escuchada desde que este servicio fue lanzado; Spotify se ha reservado las cifras exactas de reproducciones, aunque asegura que el álbum del dúo podría convertirse en el producto más consumido en el sitio web este año.

Autores

ELESPECTADOR.COM