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México: Aseguradoras dicen que el sistema de salud actual es inviable
Lunes, Julio 9, 2018 - 16:00

En el país, el 52% del gasto en salud es público, y el privado corresponde 44,5% al gasto de bolsillo y sólo 3,5% a las aseguradoras.

Ante los avances que ha tenido la tecnología en materia de salud que han incrementado los costos, así como el aumento de la esperanza de vida, las enfermedades crónicas degenerativas y las nuevas necesidades de los mexicanos, el sistema de salud actual ya no es viable.

“Pese a los grandes logros del sistema de salud (...) ante los nuevos retos, la situación actual no es viable. El sector asegurador privado puede coadyuvar también con el sistema de salud, generando cambios y desarrollando iniciativas innovadoras o nuevos modelos”, refirió en un documento Manuel Escobedo, presidente de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).

En el documento “Aseguramiento en Salud”, el sector asegurador señala que si bien la cobertura de aseguramiento médico ha aumentado, la persistencia del gasto de bolsillo de los mexicanos, así como las restricciones existentes para expandir el gasto público en salud han generado un uso ineficiente e inequitativo de los recursos que, ya de por sí, son escasos.

En México, del gasto total de salud 52% proviene del gasto público, mientras que el resto es privado; dentro de este último, 44,5% corresponde al gasto de bolsillo y sólo 3,5% a las aseguradoras.

“El gasto público también mantiene una participación mucho menor de lo que sería deseable en un país con nuestro nivel de riqueza y en donde el aseguramiento público se considera el pilar central para hacer efectivo el derecho a la protección de la salud, mientras que el gasto de bolsillo se mantiene como una fuente importante de financiamiento”, aseveró la AMIS.

En lo que se refiere al aseguramiento privado, la AMIS explicó que éste también enfrenta diversos riesgos en materia de salud, los cuales ponen en riesgo su sustentabilidad financiera y su modelo de negocio.

Agregó que pese al buen dinamismo que tiene el sector asegurador privado, éste se ha quedado rezagado, por lo cual hay margen para que mejore su papel como integrante del sistema de salud y se pueda ofrecer una mayor cobertura.

“El aseguramiento privado ha mantenido un papel reducido en el sistema de salud, pero la penetración del aseguramiento privado en México podría ser mayor, aun cuando el aseguramiento público siga siendo el pilar más importante del sistema de salud. La viabilidad del sector asegurador privado dependerá de que logre tener una mayor participación en el sector salud y de que logre cambiar su enfoque del aseguramiento”, refirió.

Colaboración Público-privada

Para lograr un mayor acceso a la protección financiera, un uso óptimo de los recursos —tanto públicos como privados—, una atención médica de mayor calidad y más homogénea en todo el sector, la AMIS afirmó que es importante que exista una colaboración público-privada.

En este sentido, el sector asegurador propone una serie de propuestas para trabajar en conjunto, como eliminar el tope de deducibilidad del aseguramiento privado; analizar la pertinencia de actualizar la regulación como la base para establecer una colaboración más estrecha entre el sector público y el privado; permitir que los trabajadores formales no asalariados puedan optar por el aseguramiento privado en salud, siempre y cuando se preserve la solidaridad en el financiamiento y se garantice la cobertura de un esquema integrado y preventivo de atención médica.

Asimismo, propone permitir que el sector privado participe en la articulación o gestión activa de pacientes con enfermedades crónicas, cubiertos bajo un esquema de aseguramiento público, además de un seguro de cuidados de largo plazo.

Además, ante los retos propios del sector asegurador, la AMIS plantea repensar el seguro privado en salud y abrir el mercado —que actualmente equivale 0,31% del Producto Interno Bruto (PIB)— a nuevas poblaciones, así como crear nuevas coberturas complementarias.

Propuso transitar del esquema tradicional de gastos médicos mayores a esquemas de seguros de atención médica más integral; introducir incentivos a la prevención; desarrollar el papel del sector asegurador como integrador/comprador estratégico de servicios y buscar mecanismos para reducir las barreras a la contención de costos y participar activamente ante una futura regulación del sector derivada de la evolución de la ciencia médica.

Autores

El Economista