El servicio de la startup ha cobrado fuerza en los últimos años, pues permite brindar financiamiento al titular de una demanda para iniciar o continuar el proceso judicial.

Qanlex, la startup de financiación de litigios enfocada en países de derecho continental, cierra un año exitoso. Fundada por argentinos, la compañía ha levantado US$ 38 millones de capital de riesgo y ya mantiene presencia en toda Latinoamérica. Su socio más reciente es Chile, país donde aterrizaron el pasado noviembre.

El servicio de Qanlex ha cobrado fuerza en los últimos años, pues permite brindar financiamiento al titular de una demanda para iniciar o continuar el proceso judicial. La cuestión es simple: si la sentencia es favorable, el financiante recibe una comisión; si el resultado es adverso, no se exige ninguna devolución. 

Este modelo es más usual de lo que aparenta: nació en el Reino Unido a mediados del siglo pasado y se expandió de forma paulatina en países con derecho anglosajón. El trabajo de Qanlex parte de la premisa de que los fondos de litigio más sofisticados no han explorado mucho la financiación en América Latina. Para impulsar su expansión, el fondo ha apostado fuerte por las herramientas digitales. 

“Una de nuestras estrategias está basada en el desarrollo de tecnología. Trabajamos con un software que realiza una búsqueda de casos potenciales a financiar en diferentes países. Para ser más específicos, la plataforma busca casos en bases de datos judiciales que nos pudieran interesar por el valor de la reclamación o la naturaleza del proceso. A partir de allí, hay un contacto comercial con empresas que mantienen un litigio en curso”, explicó Juliana Giorgi, General Counsel para Latinoamérica de Qanlex a AméricaEconomía.

Bajo este criterio, la startup ha concentrado sus esfuerzos en abrirse paso en el sector de la construcción. Giorgi señala que es una industria con muchos litigios y disputas relacionadas con contratos de infraestructura. Estos requieren de una fuerte inversión y las empresas involucradas tienen una dificultad de caja importante. 

Por otro lado, la abogada menciona que Qanlex participa en eventos internacionales no solo bajo el objetivo de posicionarse en el mercado, sino también impulsar un debate académico sobre la viabilidad de la financiación de litigios. 

“La industria del third party funding ha tenido un desarrollo tan rápido en corto tiempo que ha ocasionado discusiones sobre deberes de confidencialidad y potenciales conflictos de interés. Se ha visto la necesidad de modificar las reglas de diferentes centros de arbitraje para otorgar transparencia a quién está detrás de una disputa aportando el capital para que se pague todo”, añade Giorgi. Al mismo tiempo, Qanlex busca difundir las iniciativas más recientes del sector como el lanzamiento de seguros especializados para la industria de financiación de litigios, algo poco conocido en la región.

Más allá del sector construcción, la startup ha explorado casos de minería y arrendamiento de bienes en Perú, mientras que en los países vecinos, las tendencias varían según el contexto. 

“En Ecuador tenemos varios casos de energía que incluyen termoeléctricas; en Costa Rica, casos de desarrollo inmobiliario turístico; en Colombia, casos de petróleo y energía. En realidad, estamos abiertos a analizar y financiar cualquier gama de casos siempre que incluyan una transferencia patrimonial líquida al final de la cual el fondo pueda tomar la remuneración”, dice Giorgi.