Aunque el mercado petrolero ha enfrentado un exceso global de suministros por dos años, la excesiva oferta mundial de productos refinados es una situación relativamente nueva, resultado del aumento de producción en las refinerías en 2015 y 2016 para beneficiarse de los bajos precios del crudo.
Nueva York. Las existencias de gasolina y diésel han alcanzado un máximo a nivel global, lo que ha dejado a refinerías y operadores con pocos lugares para depositar el exceso de suministros y amenaza con recortes de producción a gran escala que podrían descarrilar una recuperación en el precio del crudo.
A menudo, las refinerías estadounidenses y europeas hacen frente al exceso regional de inventarios al exportar los suministros adicionales a los mercados donde los márgenes de diésel, gasolina y otros productos petroleros siguen siendo fuertes.
No obstante, meses con tasas de utilización en las refinerías globales por encima del promedio y la capacidad de refinación adicional a nivel global han dejado los tanques de almacenamiento de Houston a Singapur completamente llenos.
Aunque el mercado petrolero ha enfrentado un exceso global de suministros por dos años, la excesiva oferta mundial de productos refinados es una situación relativamente nueva, un resultado del aumento de producción en las refinerías en 2015 y 2016 para beneficiarse de los bajos precios del crudo y los fuertes márgenes.
La única posibilidad que tienen las refinerías ahora es reducir el procesamiento, según analistas y ejecutivos en plantas de refinación, un proceso que algunas instalaciones en Estados Unidos y Europa ya han iniciado. Esto en cambio, al menos en el corto plazo, debilitará la demanda de crudo y servirá como límite para los precios.
El petróleo Brent, el referencial global, tocó un máximo de seis meses de US$52,51 por barril en junio, lo que alentó versiones sobre una recuperación sostenida en el crudo, aunque los temores a que el exceso en los inventarios globales de productos mermaría la demanda de crudo ayudó a los precios a volver cerca a los 40 dólares por barril este mes.
"A menos hasta que los inventarios caigan, no veremos un incremento sostenible en los precios del crudo", dijo Mark Routt, economista para América en KBC Advanced Technology en Houston. Routt dijo además que no espera que el mercado vuelva a recuperarse hasta mediados de 2017.
En una nota el lunes, analistas de Morgan Stanley destacaron que la reciente caída en los precios del crudo ha impulsado los márgenes de refinación, lo que alentó a las refinerías a producir más y retrasar recortes de producción.