El pasado lunes, el TPP superó este lunes los últimos obstáculos para crear una zona de libre comercio, que representa alrededor del 40% del producto interior bruto (PIB) mundial.
Santiago. Debido al secretismo de las negociaciones del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP), la organización no gubernamental (ONG) chilena Derechos Digitales pidió este miércoles que se publiquen los documentos aprobados.
Según la ONG, las condiciones del acuerdo se mantienen en secreto y han sido evaluadas únicamente por los equipos negociadores durante los últimos siete años.
"Ahora más que nunca es necesario que los textos de la negociación, celosamente ocultos durante los últimos siete años, sean liberados, de modo que podamos conocer la real dimensión de los costos y beneficios asociados a suscribir esta alianza comercial", afirma un comunicado difundido en Santiago.
El TPP fue suscrito el 5 de octubre en la ciudad estadounidense de Atlanta por los gobiernos de Estados Unidos, México, Perú, Chile, Canadá, Japón, Malasia, Singapur, Vietnam, Brunei, Australia y Nueva Zelanda.
La organización no gubernamental, dedicada a la defensa y promoción de los derechos en el entorno digital, añadió que "lamentablemente los Congresos no pueden proponer modificaciones y "las únicas alternativas son aceptar o rechazar el texto en su totalidad".
Aseguró que las condiciones del acuerdo son fruto de un proceso que ha carecido de cualquier forma de participación ciudadana y control político, y siguen siendo desconocidas para los Congresos nacionales, la prensa y el público.
"Es por ello que ignoramos los alcances concretos que este acuerdo tiene para los habitantes de los países firmantes", advirtió la organización fundada en 2004 por un grupo de abogados vinculados a la Universidad de Chile.
Destaca que "ese hermetismo es incompatible con la democracia del siglo XXI" y añade que mientras los países avanzan poco a poco en mejorar sus democracias y establecer mejores mecanismos de transparencia pública, el TPP "es todavía un resabio de opacidad propia de regímenes autoritarios".
Plantea "si el TPP tendrá impactos en el rol del Estado en la economía, los derechos en internet o el acceso a la salud, precisamente lo que se requiere es más debate público "y no existe ninguna razón para que un tratado de esta magnitud haya sido negociado a espaldas de la ciudadanía".
La organización concluyó que, ahora es turno de los congresistas de México, Chile y Perú de estudiar con detenimiento y muy a conciencia, "si ésta (el TPP) es la mejor ruta hacia estados más desarrollados, más democráticos y donde los ciudadanos cuenten con mayores derechos".
"Si la respuesta es negativa, es importante que ejerzan las facultades que la ley les confiere y se opongan a un acuerdo económico que hipoteca el futuro de nuestras naciones y compromete los derechos fundamentales de sus habitantes", sentencia.
El pasado lunes, el TPP superó este lunes los últimos obstáculos para crear una zona de libre comercio, que representa alrededor del 40% del producto interior bruto (PIB) mundial, aunque resta la compleja aprobación en los parlamentos de los doce países firmantes.