Ante las presiones que representan el pago de pensiones, el costo financiero de la deuda y las participaciones estatales, sería recomendable que el país busque su “primavera fiscal” para el 2017, indicó Héctor Villarreal, director general del Centro de Investigación Económica Presupuestaria (CIEP).
Ante las presiones que representan el pago de pensiones, el costo financiero de la deuda y las participaciones estatales, sería recomendable que el país busque su “primavera fiscal” para el 2017, indicó Héctor Villarreal, director general del Centro de Investigación Económica Presupuestaria (CIEP).
“Este 2017 debe haber una especie de primavera fiscal, donde nos pusiéramos a debatir cómo vamos a transitar a un sistema fiscal viable y que, en el 2018, los candidatos a la Presidencia tengan propuestas muy concretas”, dijo en una reunión con medios.
Enfatizó que el candidato que llegue a la Presidencia, independientemente de si es de ideología de izquierda o de derecha, si no hace una reestructura fiscal, tendrá que realizar un Paquete Económico para el 2019 muy complicado.
“Sería terrible para el país que una discusión que genere soluciones sobre el esquema fiscal se alargue cuatro años (...) Necesitamos más ingresos y debemos tener prioridades”.
Recaudación de IVA se irá al pago de pensiones. El experto del CIEP explicó que el pago de pensiones cada vez absorbe más recursos de los impuestos que recauda el gobierno federal. Comentó que para los próximos dos años, tan sólo la recaudación que se obtenga del IVA será insuficiente para pagar las pensiones.
“El gasto en pensiones ha aumentado 14% del 2016 al 2017, esto evidencia que este gasto en pensiones está presionando a las finanzas públicas del país. La tendencia histórica apunta a mantener niveles de gasto en salud alrededor de 3% del Producto Interno Bruto (PIB) y 11% del gasto público total”.
Villarreal agregó que la política monetaria que se implemente en Estados Unidos y en México impactará de manera significativa en el costo financiero de la deuda que adquieren los estados, ya que tendrán que pagar más intereses.
“Con la normalización de las tasas de interés es probable que el gobierno federal pague cuatro décimas más del PIB de lo que tenía contemplado en los Criterios Generales de Política Económica, que es poco más de 2.5% del PIB”.
Se necesita reformar código fiscal de la federación. Con respecto a la situación económica de los estados y municipios, comentó que debe modificarse el Código Fiscal de la Federación, pues las entidades deben esforzarse más en generar sus propios ingresos y depender menos de la Federación.
“Entre las participaciones y las aportaciones que se hacen a través de los ramos 28 y 33, el gobierno federal se queda con pocos recursos, y muchas veces los estados no hacen buen uso del gasto o bien tienen hipotecadas las participaciones que reciben hasta en 25 años”.
Reiteró que se debe buscar la manera de generar más ingresos, pues la meta de 15% del PIB sigue siendo insuficiente para solventar las necesidades del país. “Si quieren que el país funcione con ingresos tributarios, éstos deben estar cercanos a representar 20% del PIB, de lo contrario seguirán financiando déficit con deuda”.
Villarreal mencionó que si bien el gobierno federal recibirá ingresos no recurrentes del remanente de operación del Banco de México, el cual le ayudará a mejorar su situación financiera, no siempre pueden estar dependiendo de periodos de depreciación del tipo de cambio para esperar estos ingresos extraordinarios.
Indicó que el pacto fiscal que hizo el gobierno federal con el sector privado sobre no incrementar ni generar nuevos impuestos en lo que queda del sexenio, debe replantearse, ya que, de no generar más recursos, se tendrán muchas presiones o recortes.
Finalmente, dijo que para los cambios y retos que debe enfrentar el país los próximos dos años, sería muy conveniente contar con un Consejo Fiscal que les permita tener un diagnóstico y mapa más claro sobre cómo empezar a mejorar la parte fiscal del país y cómo se ejerce y desarrolla el gasto público.