La revista semanal Der Spiegel dijo que un extremista islámico viviendo en el exterior había informado en recientes llamados telefónicos sobre un plan de militantes para ingresar al edificio del siglo XIX en el centro de Berlín y comenzar a disparar.
Berlín. La decisión de Alemania de aumentar las medidas de seguridad esta semana se debió al descubrimiento de un plan de militantes para ingresar al Parlamento germano y disparar contra rehenes, informó este sábado una revista local.
La revista semanal Der Spiegel, citando a funcionarios de seguridad, dijo que un extremista islámico viviendo en el exterior había informado en recientes llamados telefónicos sobre un plan de militantes para ingresar al edificio del siglo XIX en el centro de Berlín y comenzar a disparar.
El reporte dijo que la policía consideraba creíble la información.
La Oficina Federal contra el Crimen (BKA por su sigla en alemán) no realizó comentarios inmediatos sobre el reporte.
La información, dijo la revista, había llevado a funcionarios a anunciar el miércoles un aumento en la seguridad, especialmente en lugares públicos, entre ellos aeropuertos y estaciones ferroviarias.
El ministro del Interior Thomas de Maiziere dijo el jueves que las autoridades estaban en alerta contra amenazas de un ataque armado similar al que dejó 166 muertos en la ciudad india de Mumbai en el 2008.
El edificio del Parlamento es de gran importancia simbólica en Alemania. Un ataque en 1933 realzó los movimientos nazis para asumir el control completo de Alemania, en tanto la imagen de un soldado soviético colocando la bandera roja sobre las ruinas en 1945 marcó el final de la Segunda Guerra Mundial para muchos.
Fue formalmente reinstaurado como el legislativo del país poco después de la Reunificación Alemana en 1990 y diariamente lo visitan cientos de personas que caminan alrededor de su cúpula de cristal observando los debates.
El extremista, según Der Spiegel, dijo que el grupo de atacantes estaba integrado por hasta seis personas. Dos ya habían llegado a Berlín y otros cuatro, incluidos un germano, un turco y un norafricano, se encontraban en camino al país.
Alemania tiene un contingente de soldados en Afganistán y ha sido blanco de amenazas de sitios de internet extremistas.
El momento del ataque, para febrero o marzo, difiere de las declaraciones de Maiziere, que dijo que el atentado estaba planeado para antes de fines de noviembre.
Der Spiegel dijo que otro complot podría haber contribuido a la alarma, uno descubierto dos semanas atrás por autoridades estadounidense en que un grupo indio chií había enviado dos hombres que llegarían a Alemania a fin de mes.