Los precios del crudo cayeron más de US$ 5 por barril el lunes, después de que la OPEP+ superó sus divisiones internas y acordó aumentar su producción, generando preocupaciones sobre un superávit petrolero mientras las infecciones de COVID-19 suben en muchos países.
El precio del barril de petróleo ha recibido con descensos próximos al 7% el acuerdo alcanzado este domingo entre los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y otros productores aliados como Rusia para incrementar a partir del mes de agosto y de manera gradual la producción de la OPEP+.
Aunque en la apertura el descenso del crudo se había situado cerca del 1%, según ha avanzado la sesión se han ido agrandando las caídas. En concreto, la cotización del barril de Brent, de referencia para Europa, ha experimentado un descenso del 6,84%, hasta situarse en los US$ 68,56.
De su lado, la caída del barril West Texas Intermediate (WTI), de referencia para Estados Unidos, ha sido del 7,67%, hasta los US$ 66,30.
A partir de agosto los países de la OPEP+ aumentarán en 400.000 barriles de crudo al día su producción, que elevarán gradualmente hasta eliminar el ajuste de 5,8 millones de barriles diarios implementado hace un año en respuesta a la crisis del sector por la pandemia de coronavirus y que volverán a evaluar en diciembre.
Asimismo, los países productores de petróleo acordaron mantener el actual mecanismo de reuniones ministeriales mensuales durante todo el periodo de cooperación entre países de la OPEP y ajenos al cartel para evaluar las condiciones del mercado y decidir sobre los recortes de la oferta, "procurando finalizar los ajustes de producción para finales de Septiembre de 2022, sujeto a condiciones de mercado".
El acuerdo, logrado tras salvar las diferencias entre Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos, contempla un aumento de las cuotas de producción de algunos países, incluidos Rusia y Arabia Saudí, que verán su producción elevarse en medio millón de barriles diarios a partir de mayo de 2022.
Asimismo, Emiratos Árabes Unidos contará con un nuevo umbral de producción de 3,5 millones de barriles al día, por debajo de las exigencias de 3,8 millones de barriles diarios que hicieron descarrilar a principios de mes el acuerdo en el seno del cartel, pero por encima del actual horizonte de 3,2 millones.