El libro "Ser esclavo en África y América entre los siglos XV y XIX", de Catherine Coquery-Vidrovitc y Eric Mesnard, publicado por la editorial Catarata y Casa África, es un texto que revisiona la historia de la esclavitud. Una versión que rompe con una serie de interpretaciones eurocéntricas hasta ahora dominantes en este tema.
Catherine Coquery-Vidrovitc es una especialista en historia de África y profesora emérita de la Universidad Paris VII (Diderot). Sus libros e investigaciones abordan asuntos sobre los problemas políticos de la colonización, el imperialismo y el capitalismo en África. Y Éric Mesnard es profesor de historia de la Universidad de París-Est Créteil y miembro destacado del Centro Internacional de Investigación sobre la Esclavitud en el mundo. Sus investigaciones se han concentrado en la didáctica de la historia, la colonización y en la esclavitud en África y América.
Es decir, son dos reconocidas autoridades académicas en estudios africanos que en este libro plasman un enfoque revisionista de la historia de la esclavitud de los africanos traídos a América y exportados a Europa y Asia como esclavos. Además, revelan otras facetas sobre el papel que jugaron los propios africanos como esclavistas y esclavos en el oprobioso negocio de la trata, tanto hacia fuera del continente, como hacia el interior.
Coquery-Vidrovitc y Mesnard ponen en contexto realidades históricas poco difundidas en nuestro medio sobre la trata hacía los mercados del Mediterráneo, el Atlántico y el Índico. Su trabajo condensa una investigación rigurosa y con ella han puesto sobre el tapete un tercer protagonista en la historia de la esclavitud del africano: cuando disminuyeron los mercados de esclavos hacia el Atlántico por los efectos de la prohibición de su comercio, la esclavitud interna se intensificó en África, porque fueron los propios africanos quienes siguieron imponiendo el tráfico de esclavos, en alianza con europeos.
Afirman que en el momento de la conquista colonial más de la mitad de los africanos eran esclavos y citan que en el país de los Igbo, territorio actualmente del sureste de Nigeria, las clases dominantes tenían miles de esclavos trabajando en la producción de aceite de palma. Muestran otros casos como el del rey Pepel que le exigía a sus vasallos tributos en esclavos que revendía a los barcos negreros.
Al mismo tiempo, detallan que desde siglos atrás estaba institucionalizada y jerarquizada la esclavitud en las sociedades africanas y que hubo una trata negrera que se desarrolló hacia el interior de África y la que se generó hacia a América fue parte de un eslabón de un negocio que llevaba siglos desarrollándose hacia Europa y Asia, a través del Mediterráneo y el Índico.
Para ellos la esclavitud en el continente africano fue mucho más importante de lo que a menudo se ha afirmado. Por consiguiente, el papel de los africanos en la trata negrera fue más importante de lo que se había pensado hasta ahora, debido a que la esclavitud estaba muy extendida en África antes del encuentro de los dos mundos en América. Indican que ser esclavo en África no era en lo fundamental distinto de ser esclavo en otros sitios del mundo y aseguran que gran parte de estos fueron traídos a América y sus antepasados ya habían sido esclavos en África.
Analizan además que en las sociedades aristocráticas musulmanas de regiones como el Sahel, la esclavitud fue una práctica muy arraigada desde el mundo antiguo; un hombre libre no se podía casar con una esclava y la aristocracia utilizaba a las mujeres esclavas como concubinas. Y plantean que los imperios sudaneses de los soninkés, los malinkés, los bambaras y los songhais fueron esclavistas y que enviaron desde el Siglo X a millones de esclavos africanos a los mercados europeos y asiáticos por el mar Mediterráneo y el océano Índico. Describen la peregrinación del soberano del imperio Malí, Mansa Musa, a la Meca, entre los años 1324 a 1325, donde en su caravana llevaba miles de esclavos.
En conclusión, Catherine Coquery-Vidrovitc y Eric Mesnard retratan otra cara del oprobioso negocio de las ventas de seres humanos en el mundo.