El izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), en el poder, no logró la semana pasada el apoyo de los conservadores de la Alianza Republicana Nacionalista (Arena) para una asignación que incluía el pago de US$57 millones en intereses por esos bonos para el mes de abril.
El Salvador defendió este lunes la solidez de su sistema financiero después de que la agencia Fitch pusiera en 'default restringido' algunas emisiones del país centroamericano, que dejó de pagar unos intereses a fondos privados de pensiones por un desacuerdo político entre el gobierno y la oposición.
El izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), en el poder, no logró la semana pasada el apoyo de los conservadores de la Alianza Republicana Nacionalista (Arena) para una asignación que incluía el pago de US$57 millones en intereses por esos bonos para el mes de abril.
"Fitch por tanto considera que El Salvador está en mora con sus obligaciones internacionales", dijo la agencia en un comunicado, en el que bajó la calificación de la deuda local de largo plazo a "Default Restringido" (RD) y la calificación soberana en moneda extranjera a "CCC" desde "B".
El evento es el resultado de una "creciente polarización política que ha bloqueado en el Congreso las medidas fiscales necesarias para contener el deterioro de las finanzas públicas", agregó Fitch, que ya había bajado la calificación a la deuda soberana de El Salvador el 1 de febrero.
El superintendente del Sistema Financiero salvadoreño, Ricardo Perdomo, que depende del Gobierno, defendió el lunes la estabilidad del país y descartó que haya problemas de liquidez.
"La situación de impago (de bonos de fondos de pensiones) no afecta grandemente al sistema financiero por su solidez y solvencia. Este no es un problema de liquidez y esperamos que este problema sea superado mediante un acuerdo político", dijo Perdomo a periodistas.
El Ministerio de Hacienda de El Salvador había anunciado el viernes que no pudo atender el pago de intereses de la deuda porque no consiguió un permiso del Congreso para emitir 280 millones de dólares en bonos a fin de atender esos pagos en 2017.
"Queremos dejar claro que el Gobierno (...) dispone de los mecanismos financieros necesarios para el pago de la obligación correspondiente, recalcando que de lo que no disponemos es de la asignación presupuestaria que permita realizar dicho pago", dijo el ministerio en un comunicado.
El presidente Salvador Sánchez Cerén logró aprobar en noviembre del año pasado una emisión de bonos soberanos por 550 millones de dólares para atender la falta de liquidez que lo mantuvo al borde del default con los acreedores financieros.
Sin embargo, analistas consideran que esta es una señal de que cada vez será más difícil lograr acuerdos políticos ante las elecciones legislativas y regionales de 2018 y los comicios presidenciales de 2019, lo que podría agravar los problemas de la debilitada economía salvadoreña.
"Lo que ha sucedido (impago de los bonos) hay que entenderlo en clave electoral", dijo Ricardo Castañeda, analista del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI), un centro de estudios independiente con sede en Guatemala. "Por lo que el riesgo de un default más amplio se incrementa", agregó.
El Salvador, de donde decenas de miles emigran cada año a Estados Unidos por la falta de oportunidades y una de las tasas de homicidios más altas del planeta, necesitaría financiamiento adicional de US$1.300 millones para este año, según los cálculos de Fitch.