El ministro resume su hoja de ruta diciendo que busca promover nuevas inversiones al país; y reactivar la industria empleando nuevas modalidades de venta de crudo de mediano y largo plazo.
Quito. La política petrolera liderada por el ministro de Hidrocarburos de Ecuador, Carlos Pérez García, apuesta a incrementar la producción a 700.000 barriles diarios hasta el final del periodo de Lenín Moreno, mejorar los precios del crudo local, permitir una mayor participación del sector privado y bajar las importaciones. En las últimas semanas una serie de anuncios dan luces sobre cuál será la ruta del Gobierno.
A septiembre del 2012, el petróleo le representó al Presupuesto General del Estado unos US$4.491 millones; sin embargo, a septiembre de este año llega a US$1.200 millones.
El ministro resume su hoja de ruta diciendo que busca promover nuevas inversiones al país; y reactivar la industria empleando nuevas modalidades de venta de crudo de mediano y largo plazo, y ventas spot. También asegura: “Queremos usar nuevos modelos de contratos que sean más atractivos para la industria” y que haya mayor transparencia en los procesos.
Así, según Pérez, en este mes podrían llegar unos US$1.000 millones provenientes de la entrega de campos menores, mientras que la explotación del bloque ITT dejaría unos US$46.000 millones en 20 años; es decir, US$2.300 millones anuales.
El funcionario también ha buscado bajar las tarifas con los que negoció el anterior Gobierno los contratos de servicios y dispuso al gerente de Petroecuador, Byron Ojeda, hallar una nueva fórmula para el pago de contratos a largo plazo, cuya fórmula no se puede aplicar.
Y a través de una auditoría con la Organización de Naciones Unidas se buscará identificar los sobreprecios de las obras, lo que permitiría recuperar valores a futuro.
El ministro ha hablado de pedir a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) que exonere a Ecuador de cumplir los cupos de producción petrolera; o darle una licencia de dos año o retirarse de dicho organismo.
La idea de que Petroamazonas opere e invierta en Sacha también está enmarcada en la necesidad de generar una producción más rentable para el país, afirmó el ministro.
Y la construcción de la Refinería del Pacífico con estándares internacionales generaría exportación de derivados y bajaría la importación, lo que evita la salida de divisas.
Para Walter Spurrier, director de Análisis Semanal, la actual política petrolera no es exactamente una política de Gobierno, sino una diseñada por el ministro; esta es plenamente viable, pero si todo el sector económico la apoya.
Para Spurrier debe haber una claridad de hacia dónde irán los recursos, a fin de que haya una política de inversión sostenible, y no una de corto plazo en la que los fondos se gasten enseguida.
De hacer una buena gestión, el crudo podría generar ingresos adicionales por US$2.000 millones por año, lo cual significaría cubrir un 40% del déficit.
Para el exministro de Energía, Fernando Santos Alvite, la estrategia del Gobierno es hacer que el Estado vaya quedando de a poco fuera del sector petrolero, luego de que en la década pasada se generó corrupción bajo el manejo oficial.
Santos dice que es importante que no se deje solo al gerente de Petroecuador en el tema de la negociación de los contratos con Petrochina y Petrotailandia, sino que deben apoyarlo Finanzas y Cancillería.
Para Santos, la política petrolera no arrojará tan pronto los frutos, pues hubo diez años de “mal manejo y prácticas de corrupción”. Por eso cree que el Gobierno seguirá endeudándose para cubrir sus gastos.
Unos US$235millones más se obtendrían por ingresos si se ajustan los contratos de preventas petroleras.