Qatar invertirá US$65.000 millones en infraestructura para recibir este evento deportivo. Estadios, hoteles, autopistas y una nube artificial generan el mayor gasto.
A menos de dos años para que comience el mundial de Brasil, la construcción de los estadios e infraestructura parecen no llegar a tiempo. Los problemas se multiplican con el paso de los días, y la FIFA ha intervenido para que se apuren las obras.
Sin embargo, en Qatar sucede todo lo contrario. A diez años de que se dispute el mundial por esas tierras, ya existe la planificación de todo lo que se deberá armar y el gasto planificado para que se viva la mejor fiesta futbolística de la historia.
Las imágenes de las maquetas son elocuentes. Los mega estadios serán de seis estrellas, y los lujos de la ciudad harán que este evento sea el más caro de la historia con una inversión total de US$65.000 millones, según la consultora Merryll Lynch. Para que usted se haga una idea, en Sudáfrica 2010, se invirtieron 11.400 millones.
Qatar 2022 contará con un total de 12 estadios; nueve de ellos nuevos y tres remodelados, todos con un especial aire acondicionado para combatir las altas temperaturas. El gasto total de esta inversión rondará los 4.000 millones de dólares. Un dato llamativo teniendo en cuenta el total de lo invertido.
El resto de gasto se destinará en infraestructura. Saud Ghani, jefe del departamento de Mecánica e Ingeniería Industrial de la Universidad de Qatar, presentó un proyecto para ayudar a disminuir el calor, que fue visto con buenos ojos. El mismo consta en la construcción de una “nube artificial” para tapar la ciudad durante el mundial; un dirigible compacto, relleno de helio y recubierto de una fibra de carbono que se manejará por control remoto.
Además de este novedoso invento, se reconstruirán a nuevo todas las autopistas, se crearan cientos de hoteles, aeropuertos, redes ferroviarias y más. La construcción es la segunda actividad en importancia del país, solo por detrás de la industria petrolera.