Michiquillay, que considera una inversión de US$2.000 millones, iba a ser licitado el 20 de diciembre y se le veía como una iniciativa que apoyaría a la recuperación de la economía local el próximo año.
Lima. Perú postergó hasta el 20 de febrero la subasta del proyecto de cobre Michiquillay, uno de los más importantes de los últimos años, debido a la crisis política que enfrenta el presidente Pedro Pablo Kuczynski, informó este miércoles el gobierno.
Michiquillay, que considera una inversión de US$2.000 millones, iba a ser licitado el 20 de diciembre y se le veía como una iniciativa que apoyaría a la recuperación de la economía local el próximo año.
Esta es la segunda vez que se posterga el proyecto, que originalmente iba a ser subastado el 15 de noviembre. Antes, el gobierno había pedido más tiempo para conversar con las comunidades campesinas vecinas, en un país donde las protestas han frenado grandes inversiones.
La agencia estatal promotora de proyectos, Proinversión, dijo en un comunicado que la adjudicación de Michiquillay fue postergada a pedido de algunas empresas que consideraron que la actual coyuntura política afectaría la presentación de sus propuestas económicas.
"La coyuntura política añade un elemento de incertidumbre al concurso que dificulta la toma de decisión interna corporativa de cara a la presentación de una oferta económica vinculante al 20 de diciembre 2017", señaló uno de los postores, según Proinversión.
Michiquillay, en fase de exploración, está en la región norteña de Cajamarca y fue devuelto al Estado en 2014 por Anglo American, que había previsto una producción de 200.000 toneladas de cobre al año.
Perú, el segundo productor mundial de cobre y zinc, tiene una cartera de proyectos mineros cuyas inversiones suman unos US$51.000 millones.