Tras la primera vuelta, el fundador del PSL, el congresista Luciano Bivar, insinuó que el desempeño electoral de su partido le daba licencia para buscar la presidencia de la Cámara baja, una visión que parece haberse suavizado, allanando el camino para una coalición.

Río de Janeiro. El partido del candidato ultraderechista a las elecciones presidenciales en Brasil, que logró un gran resultado en los comicios legislativos de este mes, parece estar dispuesto a aceptar que el Congreso sea liderado por políticos centristas, en un intento por crear un buen clima que permita aprobar leyes.

Jair Bolsonaro obtuvo un 46% de los votos en la primera vuelta de la elección presidencial realizada el 7 de octubre y disputará un balotaje el 28 de octubre contra el izquierdista Fernando Haddad, del Partido de los Trabajadores.

Con una ventaja cada vez mayor en las encuestas, Bolsonaro cree que la presidencia está "al alcance".

El fuerte desempeño electoral del capitán en retiro del Ejército también llevó al Partido Social Liberal (PSL) a los niveles más altos de la política brasileña, lo que haría más fácil que sus aliados aprueben leyes duras que permitan, por ejemplo, facilitar el control de armas y abrir la economía.

Tras la votación en primera vuelta, el fundador del PSL, el congresista federal Luciano Bivar, insinuó que el impresionante desempeño electoral de su partido le daba licencia para buscar la presidencia de la Cámara baja.

Pero esta visión parece haberse suavizado y ahora los líderes del partido están abiertos a permitir que legisladores centristas asuman los más altos cargos en ambas cámaras. Si se concreta, esto podría allanar el camino para que se forme una coalición más armoniosa y facilitaría la aprobación de leyes potencialmente espinosas.

El presidente del PSL, Gustavo Bebianno, dijo este miércoles que sería "antiestratégico" y una "concentración de poder inadecuada" tener el liderazgo de la Cámara baja en manos del PSL, según citas publicadas en el sitio web de noticias G1.

"Estamos 100% dispuestos a negociar el liderazgo de la Cámara baja con otros partidos", dijo Bebianno, según la publicación. "Nadie está pensando en un Gobierno autoritario", agregó.

El PSL obtuvo 52 escaños en la Cámara baja, detrás del Partido de los Trabajadores, que se quedó con 56. Las férreas opiniones de Bolsonaro sobre los valores familiares, la importancia del poderoso sector agrícola y su aparente disposición de liberalizar la economía probablemente lo ayudarán a formar una amplia coalición de derecha.

En el Senado, donde el PSL tuvo menos éxito, Simone Tebet, del centrista Movimiento Democrático Brasileño (MDB), es cada vez más mencionada como una potencial líder. Bolsonaro también le ha entregado su apoyo, según una fuente de la campaña.

Bolsonaro, de 63 años y que ha reducido sus actos de campaña mientras se recupera de una puñalada en el abdomen que sufrió en un mitin a comienzos de septiembre, ordenó a su equipo que se alejara del centro de atención para evitar hacer declaraciones públicas que podrían obstaculizar su camino hacia el Palacio de Planalto, dijeron fuentes de la campaña a Reuters.