A pesar de que el fracaso es una realidad en el ecosistema emprendedor mexicano, el potencial en el país es enorme.
Para el 76% de los mexicanos, nuestro país es un lugar factible para iniciar un negocio, según datos del Índice de Espíritu Emprendedor Amway (AESI, por sus siglas en inglés), que se incluye dentro del Reporte Global de Emprendedores 2015.
La encuesta realizada a 44 países por la compañía de social marketing, Amway, cuestionó a los nacionales acerca de las habilidades y los recursos necesarios que hay en México para emprender, lo que colocó al país en el segundo lugar a nivel mundial con estas características, únicamente por debajo del 81% que obtuvo China y muy por encima del promedio internacional de 47%.
Sin embargo, esta visión no la comparten las emprendedoras mexicanas, ya que sólo 42% de ellas cree que el país ofrece las condiciones necesarias para arrancar una empresa. Aunque esto no es impedimento para que emprendan, al contrario, 83% de las féminas puede imaginarse iniciando un negocio, en comparación con el 79% de los hombres.
“Este fenómeno se debe en gran medida a que las mujeres encuentran un número limitado de oportunidades de crecimiento en el trabajo, por lo que las más preparadas observan una mayor probabilidad de crecer mediante un negocio propio que dentro de una empresa”, expresa Teresa Incháustegui Romero, directora general del Instituto de las Mujeres en la Ciudad de México.
Y aunque ellas tienen menos probabilidades de estar autoempleadas (7% en contraste con 13% de hombres), la independencia (46%), la realización personal (44%) y el acceso a un segundo ingreso (37%), son los principales motivos por los que se arriesgan a iniciar un negocio.
Fracasar, el gran obstáculo
En el Reporte Global de Emprendedores 2015, se expone que el temor al fracaso es considerado como el principal obstáculo para emprender del 87% de los mexicanos encuestados. Entre los factores que inhiben el deseo de arrancar una empresa están las altas cargas financieras (46%), las crisis económicas (29%), la decepción personal y el desempleo (ambas con 16 por ciento).
“El fracaso se convierte en las heridas del cuerpo de quienes están emprendiendo, es lo que los hace asumir actitudes diferentes frente a nuevos proyectos. Nosotros, como sociedad emprendedora, debemos ser tolerantes al fracaso, no castigarlo (…) El gobierno debe trabajar en una legislación que sea más amable para aquellos que no tuvieron éxito”, recomienda Enrique Jacob Rocha, presidente del Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem).
Por su parte, José Ramón Torres, académico e investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y colaborador en el reporte de Anway, refirió que a pesar de que el fracaso es una realidad en el ecosistema emprendedor, el potencial en el país es enorme:
“El 90% de los encuestados tiene una actitud positiva hacia el emprendimiento, pero se arriesga a iniciar un negocio, por lo que el potencial de crecimiento es del 81%”, menciona el académico.
El Reporte Global de Emprendedores 2015 se elaboró a través de encuestas en 44 países a más de 49,750 personas. Cabe mencionar que México, Colombia y Brasil, son los únicos países representantes de América Latina.
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