Mayor nivel de inflación en marzo interrumpió aceleración del salario real.
Montevideo. La aceleración en el ritmo de aumento de los precios de marzo, en comparación con el año anterior, llevó a que el incremento del poder de compra de los trabajadores uruguayos se moderara muy levemente en ese período, tras dos meses consecutivos de aceleración. El mayor impulso del salario nominal en ese mes no fue suficiente para mantener el ritmo de crecimiento del poder adquisitivo.
La capacidad de consumo de los salarios aumentó 3,57% en marzo con relación a igual mes del año pasado, según los datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este incremento fue levemente menor al de la medición de febrero, cuando la variación interanual era de 3,64%. De ese modo, el poder adquisitivo de los salarios cortó dos meses seguidos de aceleración.
El menor ritmo de aumento del salario real se explicó por una la suba de los precios en marzo, ya que mientras que en febrero la inflación se ubicó en 7,43% interanual, en marzo se situó en 7,55%. De ese modo, el incremento de los precios más que compensó el mayor aumento del salario nominal, que pasó de crecer a una tasa interanual de 11,3% en febrero a 11,4% en la medición de marzo.
Ese escenario se trasladó a la capacidad adquisitiva de los trabajadores privados. El salario real de este segmento de la población aumentó 4,5% anual, tras el incremento de febrero de 4,7%. En tanto, los asalariados públicos aceleraron el alza de su capacidad de consumo por segundo mes consecutivo, pasando de crecer 1,9% a 2% en la medición interanual.
Dentro del sector privado, la actividad en donde creció menos el poder de compra fue en la de servicios sociales y de salud (3,1%).
Le siguieron las actividades de intermediación financiera y hoteles y restaurantes, con un aumento de 3,8% y 3,9%, respectivamente. Por otro lado, los sectores que tuvieron los mayores incrementos fueron los del comercio (5,2%) –siendo la única rama de actividad donde se aceleró el ritmo de aumento del salario real– y actividades inmobiliarias (5,1%). Un escalón por debajo se ubicó el incremento del poder adquisitivo de los trabajadores de la industria manufacturera, de 5%, y los de la construcción, con un aumento de 4,4%.
