El descenso de este indicador en los últimos meses permitió al Banco Central decretar la semana pasada su primer recorte de la tasa de interés en 25 puntos base a un 13%, en busca de impulsar una recuperación de la debilitada economía.

Colombia registraría una inflación de 0,61% en diciembre, con lo que acumularía un 9,43% el año completo, logrando ceder a un dígito y lo que jugaría a favor de que el Banco Central decrete nuevas reducciones de su tasa de interés, reveló el jueves un sondeo de Reuters.

Pese a que el indicador se situaría por debajo del 13,12% que anotó durante 2022, aún está lejos de la meta de largo plazo del Banco Central de 3%, objetivo que solo se lograría dentro de dos años. Las proyecciones de los 22 analistas consultados para el último mes del año fluctuaron entre un alza de los precios al consumidor de un 0,30% y un 0,80%.

"Sería una buena noticia para Colombia en la medida en que desatora un poco al Banco de la República y le permitiría eventualmente hacer más recortes de la tasa de interés adelante", dijo Wilson Tovar, gerente de investigaciones económicas de la correduría Acciones y Valores.

El descenso de la inflación en los últimos meses permitió al Banco Central decretar la semana pasada su primer recorte de la tasa de interés en 25 puntos base a un 13%, en busca de impulsar una recuperación de la debilitada economía.

El estatal Departamento Nacional de Estadísticas (DANE) publicará el dato de inflación de diciembre el 9 de enero. En tanto, la cuarta economía de América Latina acumularía al cierre del próximo año una inflación de 5,50% y finalizaría el 2025 en un 3,80%.

"Con ese enfriamiento que hemos visto recientemente de la economía es posible que esta tendencia de precios a la baja se mantenga", agregó Tovar. No obstante, los analistas resaltaron eventuales presiones inflacionarias el próximo año derivadas del efecto del fenómeno climático de El Niño sobre las tarifas de la electricidad, así como por el alza de los precios del diésel, combustible que utiliza principalmente los vehículos de carga, lo que podría impactar a los precios de los alimentos y mercancías.

El comportamiento de los precios dependería también del incremento del salario mínimo que decrete el Gobierno en los próximos días y que podría generar presiones sobre algunos bienes y servicios.