Las conexiones neuronales que se generan en los primeros años hacen que adoptar una lengua distinta a la nativa sea más fácil y efectivo.

Reza el dicho popular que “los niños son una esponja”, para referirse a que las costumbres y los hábitos que aprenden en los primeros años de vida son las que pondrán en práctica cuando sean adultos. En términos científicos, entre los 0 y los 4 años los niños generan más conexiones neuronales. Quiere decir que en este período se forma el cerebro y éste actúa como una esponja, ya que tiene una mayor capacidad para absorber y asimilar la información de forma más rápida y sencilla.

Así las cosas, durante la infancia la preocupación no debe estar solo en la alimentación nutricional, sino también en la información y estímulos lingüísticos para los más pequeños. Los primeros años de vida son el momento ideal para darles a ellos un regalo que valorarán de grandes: el estudio de un segundo idioma. La elección de cuál enseñarles para que no se queden solo con el nativo, es una decisión de los padres. Sin embargo, las exigencias del mercado hacen que cada vez sea más necesario el aprendizaje y dominio del inglés.

Andrés Moreno, fundador y CEO de Open English, la escuela de inglés online líder en la enseñanza de este idioma, afirma que, en el caso puntual de Colombia, el 90 % de los estudiantes de bachillerato tienen un nivel básico de inglés y solo el 2 % está en un nivel intermedio. “Una de las principales razones detrás de estas cifras es que los profesores que trabajan en las escuelas también tienen un nivel básico. Hicieron un estudio a 15.300 profesores y el 43% de ellos no alcanzaba un nivel b2. Mientras ellos no tengan un nivel conversacional, es difícil que los estudiantes mejoren”.

- ¿Ha mejorado el panorama?
- Hay una buena intención en Colombia, empezando por el propósito que tienen de ser el mejor país educado en América Latina para el 2025. Desconozco el avance del último año, pero lo que sí hemos notado es el interés cada vez mayor por parte de los consumidores colombianos por educar a sus hijos en inglés.

- ¿Cuáles son los principales desafíos?
- Sin duda alguna, el nivel de los profesores es el primer reto. Si ellos no tienen la entonación y la pronunciación necesaria, es muy difícil que puedan llevar a los niños a una fluidez en el idioma. Lo segundo es la metodología y lo digo por experiencia personal. Una cosa es aprender inglés en una clase cada semana y con libros, y otra tener la oportunidad de practicarlo todos los días

- ¿Cuál es la propuesta que hace desde su experiencia?
- Viendo las cifras que le comenté y los resultados que hemos obtenido en diez años como compañía, empezamos a desarrollar en 2016 un producto para niños. Rediseñamos la plataforma de aprendizaje y buscamos profesores que fueran expertos en aprendizaje de los más pequeños e implementamos mecanismos de seguridad para poder dictar las clases. Lo que surgió de ese esfuerzo, después de un año de armar el producto, fue Open English Junior.

- ¿Qué metodología usan?
- Todo el aprendizaje se da en clases en vivo con profesores nativos del idioma inglés. Los niños eligen sus horarios y la frecuencia con que lo quieren hacer. Hemos visto que son más juiciosos que los adultos. Estudian más. A los padres les llega el reporte para ver el uso que le dan a la plataforma y todas las clases se graban en video para que puedan ver lo que los niños hicieron.

- ¿Qué tan eficaz les resulta a los niños aprender inglés a través de una plataforma “online”?
- El aprendizaje de un idioma depende mucho de la práctica y para los niños el hecho de poder tener un profesor nativo les permite copiar ese acento, esa entonación, empiezan a asumir ese vocabulario como suyo y la práctica de todos los días ayuda a que sea un proceso más rápido que la enseñanza tradicional. Los niños son mejores en el uso de la plataforma que los padres. Ellos mismos se adueñan de la experiencia.

- Resúmanos las ventajas de hablar un segundo idioma.
- El inglés me ha permitido abrirme al mundo. Sin el inglés no hubiese podido ni comenzar mi empresa ni llevarla a Estados Unidos a levantar capital; tampoco poder armar equipos de trabajo. El inglés es el idioma global. Si se sienta un francés con un peruano y un japonés, van a hablar inglés y esa es la realidad en el mundo corporativo, nosotros lo vemos así. Aprender inglés de adulto tiene su reto, es más fácil aprenderlo de niño. Es una gran oportunidad para ellos. Yo aprendí hablando, escuchando, y eso no se olvida.