En el país que más consume este tipo de productos en América Latina, dos marcas ofrecen máquinas para prepararlos a total gusto del usuario.
Ocho litros de helado per cápita se consumen en Chile al año. La cifra ubica al país como el de mayor preferencia por estos productos en la región. Le siguen Uruguay (3,7), Argentina (2,7), Costa Rica (2,5), Brasil (2,1) y Colombia (1,9).
En ese contexto, la preocupación resulta evidente, ya que son varios los informes que indican que uno de los principales riesgos de los helados envasados es su alta cantidad de azúcar.
El consumo de helados dejó hace rato de ser estacional y se amplió para todo el año. Por ello, la nutricionista Carolina Wittwer apunta que una clave importante es "tener consciencia de lo que se está consumiendo, informarse, conocer las elaboraciones".
Recomienda como paso básico leer las etiquetas de los helados envasados, siguiendo el orden en que aparecen los ingredientes. "Si el azúcar sale dentro de los primeros tres lugares quiere decir que ese helado es una bomba calórica, lo mismo con la crema y los colorante artificiales”.
Ante este riesgo surge en Chile como tendencia en los últimos años la elaboración casera de helados. La italiana De’Longhi y la chilena Betterlife, por ejemplo, ofrecen diferentes alternativas de máquinas que automatizan este proceso, con sistemas de enfriamiento que facilitan la preparación desde 400 grs hasta 1 litro, asegurando frio constantes durante toda la preparación.
Wittwer señala que la principal ventaja de estas alternativas es la elección los ingredientes y, por lo tanto, la posibilidad de bajar los riesgos de consumos excesivos de ingredientes como azúcar o cremas.
“Cualquier helado de agua envasado trae altas cantidades dulces. Las papilas gustativas se duermen con el frío, por eso es difícil cuantificar de buenas a primeras”, comenta la especialista.
Con la alternativa de preparar helados en casa, es posible mezclar fruta, lácteos descremados, incluso leche cultivada; se pued eoptar por frutas de distintos tipos y también otros agregados como el jengibre, por sus variadas propiedades curativas y de ayuda a la digestión.
"Se puede agregar lavanda, que ayuda a controlar el estrés, y cáscara de naranja, que tiene propiedades tranquilizantes y sedantes”, comenta Wittwer.
Dentro de las opciones para las recetas que se pueden preparar con las máquinas nombradas están los simples helados de agua, también con productos saludables como yogurt, en todas sus versiones, adicionando -por ejemplo- endulzantes naturales o artificiales, los que permiten que el helado sea muy bajo en calorías.
El proceso en general tarda entre cuarenta minutos a una hora, en donde de manera rápida, fácil y entretenida, se pueden confeccionar diferentes recetas para disfrutar.
