La decisión, comunicada a través de la Superintendencia Financiera, validó un registro que había sido inicialmente aprobado por la Cámara de Comercio de Medellín el pasado 10 de enero.
La Superintendencia de Sociedades de Colombia confirmó la inscripción de Jorge Andrés Carrillo como presidente de Interconexión Eléctrica (ISA), resolviendo una larga disputa legal que cuestionaba la transparencia de su nombramiento.
Este fallo puso fin, al menos temporalmente, a meses de controversias y dejó en firme el nombramiento del ejecutivo al frente de la compañía energética del Grupo Ecopetrol.
La decisión, comunicada a través de la Superintendencia Financiera, validó un registro que había sido inicialmente aprobado por la Cámara de Comercio de Medellín el pasado 10 de enero.
Sin embargo, este nombramiento, que data de agosto de 2024, estuvo desde el principio envuelto en señalamientos de irregularidades, apelaciones legales y acusaciones de falta de transparencia, tensando el panorama administrativo de una de las principales empresas energéticas del país cafetero.
El origen de la controversia se remonta a noviembre de 2024, cuando la Cámara de Comercio de Medellín inscribió el nombramiento de Carrillo como presidente de ISA. Este proceso fue inmediatamente impugnado por el accionista Julio César Yepes, quien alegó omisiones en las actas y documentos que sustentaron la elección, calificándolos de incompletos y potencialmente irregulares.
Yepes no estuvo solo en sus objeciones. El Consejo de Estado, tras recibir una demanda de nulidad electoral presentada por el diputado antioqueño Luis Eduardo Peláez, solicitó detalles adicionales sobre las actas de la junta directiva de ISA. El alto tribunal exigió esclarecer si el proceso había cumplido con los requisitos legales y si Carrillo había tomado posesión efectiva del cargo en medio de las controversias.
Mientras estos recursos se tramitaban, la Cámara de Comercio de Medellín suspendió temporalmente la inscripción de Carrillo, dejando a la compañía en un estado de parálisis administrativa. Durante este periodo, el ejecutivo no pudo firmar contratos ni tomar decisiones estratégicas cruciales, limitando su capacidad operativa.
La resolución emitida por la Superintendencia de Sociedades confirmó que el extracto del acta de designación cumplía con los requisitos legales. Según el ente, los argumentos de Yepes carecían de fundamento jurídico suficiente para invalidar el registro.
Este fallo permitió a Carrillo asumir plenamente sus funciones como presidente de ISA desde el 24 de enero de 2025.
Sin embargo, el caso no está completamente cerrado. La demanda de nulidad electoral aún sigue en curso ante el Consejo de Estado, lo que mantiene un velo de incertidumbre sobre la estabilidad de Carrillo en el cargo. Este organismo podría anular el nombramiento si encuentra irregularidades en el proceso de selección, dejando a la empresa nuevamente en una encrucijada.
¿CÓMO LLEGÓ CARRILLO A LA PRESIDENCIA?
El nombramiento de Carrillo en agosto de 2024 estuvo marcado por divisiones dentro de la junta directiva de ISA, compuesta por nueve miembros, incluyendo figuras destacadas como Ricardo Roa, presidente de Ecopetrol, y David Riaño, vicepresidente de Soluciones de Bajas Emisiones de la misma compañía.
Cinco de los integrantes avalaron su designación, mientras que cuatro se opusieron, reflejando una polarización que ha complicado su gestión. Las críticas apuntan a posibles influencias políticas en la decisión, dado el respaldo que Carrillo recibió del presidente Gustavo Petro. Estas tensiones han generado desconfianza entre accionistas y analistas del sector energético.
Mientras Carrillo comienza a ejercer plenamente sus funciones, ISA enfrenta retos significativos, tanto internos como externos. La compañía debe restaurar la confianza de los inversores y superar el impacto de los conflictos legales en su reputación.
Además, deberá gestionar eficientemente los proyectos estratégicos de la empresa en un contexto donde la percepción pública y empresarial ha sido golpeada por las controversias.
A pesar de las críticas, ISA ha reiterado que Carrillo está capacitado para liderar la empresa y que el proceso de su elección fue legítimo.
Sin embargo, hasta que el Consejo de Estado emita un fallo definitivo, la incertidumbre seguirá pesando sobre la administración de la compañía.
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