Salirse del pensamiento lineal e innovar, son cosas que hace una persona creativa y es a través de un pensamiento divergente que las personas destacan pero, ¿qué hace a unos más creativos que otros?
Un estudio realizado por los investigadores Edward Nęckaa y Teresa Hlawaczb se enfocaron en el temperamento de 60 artistas visuales y 60 trabajadores financieros. Para ello determinaron el temperamento como algo propio de las personalidades de los individuos, algo innato y no aprendido. Mientras que el pensamiento divergente es un proceso en el que se generan muchas ideas tras explorar muchas soluciones.
En el experimento se detalla que tanto los artistas como los trabajadores financieros fueron capaces de ofrecer diferentes soluciones, pero los artistas se destacaron, ya que alcanzaron diferentes niveles de pensamiento divergente. Sin embargo, el temperamento entre ambos grupos no fue muy diferente.
Aunque algunos artistas con las calificaciones más altas tanto en temperamento como en pensamiento divergente tuvieron en común lo siguiente:
- Vivacidad: Responden rápido a los estímulos, un alto ritmo de actividad, y la capacidad de cambiar entre acciones.
-Resistencia: Tienen la capacidad de comportarse de manera eficiente y adecuada a pesar de la intensa estimulación externa o independientemente de la necesidad de prestar atención durante períodos de tiempo prolongados.
-Actividad: Presentan la tendencia generalizada para iniciar numerosas actividades que conducen o provocan rica estimulación externa; se concibe como el regulador básico de la necesidad de estimulación. Los investigadores vieron la 'actividad' como algo crucial.
Encontraron que las personas con una alta calificación en actividad usan a menudo sus experiencias como un nivel subyacente de pensamiento divergente y la actividad creativa. Con esto, se entiende que la creatividad no se trata sólo de producir sino de lo que 'consumimos', esas experiencias bien organizadas, que podemos someter a una curaduría bien pensada, nos permiten ser más creativos.