A pesar de los constantes cuestionamientos a los influencers, lo que se viene para este año es que éstos están cada vez más comprometidos en su labor de colaborar con una marca.
Las redes sociales son un laboratorio de incesantes cambios, nuevas funciones, algoritmos y diseños con el objetivo de que no decaiga la atención del usuario.
Como toda novedad, el marketing con influencers no nació con las reglas escritas y durante sus años de recorrido ha desafiado con sus prácticas todo lo conocido sobre el marketing. En 2020 encontraremos una industria del marketing digital con influencers bastante consolidada, pero siempre abierta a la innovación y a los cambios.
Las redes sociales nos han demostrado que el usuario no quiere un contenido que le diga poco o nada, sino que tiende a relacionarse con aquellas personas que percibe como cercanas, y no necesariamente las rechaza si se advierte abiertamente que ese contenido es patrocinado. Los mismos influencers en una clara tendencia hacia la profesionalización de su actividad en redes sociales también empiezan a tener conciencia de que ciertas prácticas -como la compra de seguidores- pueden mostrar resultados a corto plazo, pero a la larga perjudican a todo el ecosistema.
Y las marcas pueden y deben aprovecharlo. No se trata más de alcanzar a un grupo demográfico determinado, sino de encontrar a esos verdaderos conocedores y prescriptores del nicho al que está dirigido el producto y adoptar las mejores prácticas para alcanzar la mayor transparencia posible. Un favor que nos hacemos todos como parte de la industria.
A pesar de los constantes cuestionamientos a los influencers, lo que se viene para 2020 en marketing digital con influencers es que éstos están cada vez más comprometidos en su labor de colaborar con una marca.
Del lado de las plataformas, Instagram consolida su posición como la favorita para campañas de marketing y TikTok seguirá ganando adeptos mientras las marcas buscarán acercarse al público joven a través de colaboraciones con influencers en esta plataforma.
Del lado de los anunciantes, la mayoría seguirá apostando por los influencers a la hora de planificar sus campañas y buscarán combinar sus estrategias con otras herramientas del marketing digital como el SEO y el SEM.
Recordemos que el marketing de influencers no es publicidad. El marketing de influencers es un “endorsement”, es decir, un respaldo que cobra sentido en la narrativa tanto del influencer como de la marca y que resuena en una audiencia porque “todos somos influencers”.
FOTO: PEXELS.COM