10 pequeños inventos que nacieron en Alemania
Martes, Marzo 28, 2017 - 10:09
Desde la Fanta hasta el MP3, el ingenio germano ha sido el respondable de aplaudidas creaciones.
Hay algunos en retirada, como la perforadora de papeles o los botines con tacos atornillables. Otros que quizá nunca pasarán de moda, como el acordeón o el pino navideño. Lo innegable es que las siguientes invenciones tienen un origen común: Alemania.
El árbol de Navidad
Finlandia puede reclamar el origen de San Nicolás, pero el árbol de Navidad definitivamente viene de Alemania. Cerca del año 1800 se puso de moda poner un árbol navideño en los palacetes alemanes, pero al final del siglo XIX la tradición se generalizó. Antes, el árbol era decorado con frutas, nueves y velas. Hoy, la ornamentación navideña prácticamente no conoce límites.
El acordeón
Aunque el instrumento musical es asociado principalmente con la Chanson francesa, en realidad fue inventado en 1822 por Christian Friedrich Ludwig Buschmann. Al fabricante de instrumentos de Turingia se le atribuye además la invención de la armónica. Ambos instrumentos han conquistado el mundo, tanto en las calles como en las salas de concierto.
La cinta adhesiva
Como si haber inventado la crema Nivea y el lápiz labial humectante Labello fuera poco, el boticario Oscar Troplowitz desarrolló también la idea de la cinta adhesiva, que con el paso de las décadas ha demostrado ser un instrumento útil en un sinnúmero de situaciones. Además, también inventó las bandas adherentes con fines medicinales.
La perforadora
Solía ser la reina de los escritorios, pero la digitalización de documentos le restó mucha popularidad. El reinado, sin embargo, duró lo suficiente. Matthias Theel y Friedrich Sonnecken inventaron la perforadora e inscribieron la patente el 14 de noviembre de 1886. Desde entonces, el sonido de este accesorio marcó el ritmo de la actividad en millones de oficinas en todo el mundo.
Fanta
Durante la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos quería sancionar fuertemente a Alemania y, entre otras cosas, promovió un embargo de Coca-Cola. Pero el jefe de esta empresa en Alemania, Max Keith, decidió inventar otra bebida con ingredientes como pulpa de manzana. Fue el nacimiento de un refresco de culto.
El taladro eléctrico
Poco a poco se ganó un lugar como símbolo de tareas tradicionalmente masculinas. La caja de herramientas no está completa sin uno de ellos. El taladro fue inventado en 1889 en Australia, pero fue en Alemania donde el empresario Wilhelm Emil Fein desarrolló la versión portátil. Sin este aparato, no hubiera sido posible realizar uno mismo tantas reparaciones domésticas.
MP3
Tan invisible como omnipresente: el MP3 fue tan solo un deseo, hasta que Karlheinz Brandenburg convirtió en realidad la compresión de archivos de audio. Y aún más: el nuevo formato permitió el mejor almacenamiento y transferencia de música digitalizada. Fue el punto de partida de una nueva industria musical, con sitios como Napster.
El filtro para café
En cada uno de nosotros se esconde un inventor. En 1908, Melitta Bentz, ama de casa, se preguntó por qué sabía tan amargo el café que bebía. Así que se puso a probar con un filtro experimental de papel, y obtuvo la recompensa de una bebida de muy balanceado sabor. Bentz patentó su idea. Hoy, ésta da empleo a 3.300 trabajadores en el consorcio Melitta Group KG.
Botines con tacos atornillables
Si bien los botines de fútbol fueron inventados en Inglaterra, fue Adi Dassler, fundador del consorcio Adidas, quien en 1954 desarrolló la técnica de tacos intercambiables y atornillables en la suela. Seguramente eso contribuyó al primer título mundial de Alemania. El hermano mayor de Adi, Rudolf Dassler, que trabajaba para la competencia, montó en cólera, pues reclamaba para sí el invento.
El taxímetro
O se le ama, o se le odia. El taxímetro fue inventado en 1891, en Berlín, por Friedrich Wilhelm Gustav Bruhn, por encargo del pionero del automóvil, Gottlieb Daimler. A algunos les puso los cabellos de punta. ¿Cambiará algo con el modelo de negocios de Uber? ¿Se acerca a su fin el taxímetro? No, si los sindicatos de taxistas se imponen a su nueva competencia.