Una vez obtenida la financiación y reunido un equipo, se debe valorar si se cuenta con los conocimientos técnicos, operacionales y financieros para desarrollar su idea.
Con el paso del tiempo y la irrupción de nuevas formas de trabajo provenientes de países desarrollados, las empresas cada vez más se están abriendo a la posibilidad de innovar en sus procesos, y también le están dando la oportunidad a sus trabajadores de ser los encargados de eso. A esta modalidad se le conoce más como intraemprendimiento.
En ese sentido, el profesor de Iniciativa Emprendedora del IESE, Hakan Ener, ofreció una serie de consejos - en una pubilicación del IESE- para innovar dentro de una empresa. Aquí un extracto.
1. No pierdas el tiempo elaborando un plan de negocio exhaustivo. Comprueba primero el interés que suscita tu proyecto. Dalo a conocer. Si tiene buena acogida, empieza a preparar la presentación que harás ante tu jefe o el consejo.
2. Recaba apoyos entre tus colegas antes de vender la idea a la alta dirección. Podrías necesitarles para sacar adelante tu proyecto, así que convénceles de que se trata de una oportunidad y no de algo que les distraerá de su trabajo. Cuantos más apoyos sumes, más atractiva será tu idea.
3. Establece los indicadores de rendimiento cuantitativos y cualitativos que medirán el Cómo emprender dentro de tu empresa Impact@Work #17 / Enero 2016éxito de tu proyecto. Dado que puede tardar en ser rentable, ¿cómo juzgarás si va según lo planeado? Por ejemplo, ¿quieres que tu producto sea el de mejor rendimiento, el más ecológico o el más innovador del mercado?
4. Redacta varias versiones de tu presentación, una para los expertos de tu empresa y sector, y otra para aquellas personas ajenas cuyo conocimiento varía. Piensa en cómo puedes vender mejor el potencial de tu proyecto según el target.
5. Ficha a un alto directivo para que te patrocine u oriente durante la presentación y el desarrollo del proyecto.
6. Alinea tu idea con la estrategia. Si esta se encuentra en un momento de transición, habla con los líderes para ver cómo tu proyecto podría complementar los cambios en el rumbo de la empresa.
7. No presentes un plan de inversión plurianual. Comunica a tus superiores el capital mínimo que necesitas para empezar. Es más probable que te lo concedan si es una cantidad pequeña y, además, no te atarás a un plan hipotético que podría no funcionar una vez en marcha.
8. Véndete bien y muestra lo comprometido que estás invirtiendo tiempo y recursos adicionales en tu proyecto. Al igual que el fundador de una startup, debes estar dispuesto a hacer sacrificios. A los líderes de tu empresa les tienes que gustar tú además de tu idea.
9. Estudia qué argumentos podrían surgir en contra de tu proyecto durante la presentación y cómo rebatirlos.
10. Una vez obtenida la financiación y reunido un equipo, valora si cuentas con los conocimientos técnicos, operacionales y financieros para desarrollar tu idea.
11. A no ser que decaiga el entusiasmo con tu proyecto, no te preocupes si el plan original cambia y deviene en otra cosa. Los “intraemprendedores” de éxito son flexibles y siempre están a la caza de nuevas oportunidades que cubran las necesidades de los clientes, abran nuevos mercados y/o se adapten a las fortalezas y habilidades de sus equipos.
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