Estos planes surgen con mayor prevalencia durante coyunturas difíciles.

El 36% de las empresas de Argentina cuenta con algún programa de Retiro Anticipado, según una encuesta realizada por Mercer, consultora global líder de Recursos Humanos, entre 60 empresas líderes del mercado.

El plan optativo de retiro anticipado dirigido al segmento de empleados de mayor edad tiene la finalidad de obrar de facilitador del proceso de jubilación. Implica una forma de establecer “un puente” entre el momento efectivo del retiro optativo y el momento de obtención de la primera prestación previsional.

“Los Planes de Retiro Anticipado surgen con mayor prevalencia durante coyunturas difíciles. Una proyección de resultados magros frente a una determinada coyuntura podría traer como consecuencia la necesidad de reducir personal”, explicó Ana María Weisz, directora de Retiro de Mercer. “A la vez, el talento es escaso y los tiempos a la larga o la corta mejoran. Por ello, se comienza por acelerar las etapas de retiro en las poblaciones mayores”, agregó Weisz.

Es aconsejable para participar que la persona ya cuente con los 30 años de aportes requeridos por ley. En cuanto a la edad para ofrecer retiros anticipados es de alrededor de 60 años hasta algo menos de 65.

El 78% de las empresas establece requisitos de edad para otorgar el beneficio, mientras que el 58% establece requisitos de antigüedad para otorgarlo.

En cuanto a la forma en que se establece el programa, el 60% lo hace caso a caso; mientras que el 25% lo define a través de una política, y el 15% por medio de una práctica.

“Hasta la incorporación al plan de retiro anticipado el trabajador ha contado con el paraguas protector de un empleador casi siempre omnipresente al momento de operar como red de contención. El entramado de beneficios otorgados por las empresas se desmorona abruptamente el último día de relación laboral y el primer día de la nueva etapa constituye una página en blanco. Un proceso de retiro bien elaborado y planificado contribuye al diseño de la etapa que se inicia”, señaló Ana María Weisz

Para establecer el “puente” entre el momento efectivo del retiro optativo y el de la obtención de la primera prestación previsional es necesario un desarrollo a través de diversas etapas. Este puente queda constituido por un asesoramiento previsional de excelencia, un esquema de solución de la interrupción del ingreso hasta que perciba la jubilación, y una cobertura de salud que le permita afrontar inconvenientes.