Ser gerente, director o CEO requiere determinadas habilidades para llevar a la compañía al lugar donde quiere estar a pesar de las dificultades.
Sentar las bases que en el 2017 les permitirá a las compañías afrontar el crecimiento esperado a partir de las inversiones que realicen, es uno de los desafíos que se presentan este año en el ámbito empresario; ya que para lograrlo deberán superar primero un período más complejo atravesado por medidas económicas que impactan tanto en el consumo como en las ventas.
Por esto, es fundamental que las empresas empiecen a divisar un escenario próspero a mediano y largo plazo, conformando y preparando equipos para que sean capaces de abordar planes, inversiones y proyectos en cuanto se activen.
Para ello, "el rol de los lideres es clave pues son los responsables de armar y motivar al equipo y de marcar el norte para llevar a la compañía al lugar donde quiere estar sorteando toda difilcultad que se presente en el camino", sostiene Ezequiel Palacios, socio director de Glue Consulting.
Esto se traduce en la necesidad de ocupar posiciones de Top Management con ejecutivos que cuenten con cuatro habilidades clave:
1. Resilencia: es una de las capacidades más valoradas hoy en día porque tiene que ver con ser un buen “piloto de tormenta”, con poder transitar y salir airosos de situaciones complejas.
2. Apertura Mental: poder pensar a mediano y largo plazo, imaginando un escenario próspero es esencial. Los ejecutivos tienen que ser capaces dedesarrollar soluciones creativas para generar oportunidades de negocios para sus empresas en un entorno que aún no pueden ver pero que va a venir. Hay que reinterpretar la realidad y abrir la cabeza para pensar distinto.
3. Conocimiento del mercado: analizar los distintos segmentos de consumo para entender cómo va a estar configurado el escenario tanto a nivel local como en el exterior y qué es lo que va a demandar el consumidor, es primordial para poder captar nuevas oportunidades de negocio. Anticiparse y atreverse a innovar, a pensar en nuevas categorías de producto y en nuevos mercados tanto nacionales como internacionales, puede marcar la diferencia en la consecución de los objetivos de negocio.
4. Capacidad de reinventarse: que el ejecutivo pueda aprender y adaptarse constantemente a nuevos contextos de negocios es una skill clave que los hace más competitivos en el mercado. Son profesionales que se destacan por pensar y actuar de manera creativa desarrollando soluciones que salen de lo común, mejoran procesos y vuelven más rentable a la empresa.
Contar con líderes flexibles, innovadores, con poca resistencia al cambio y un alto nivel de motivación para hacer cosas nuevas, decanta en equipos con las mismas características que hacen de la empresa, una organización más inteligente, ágil y flexible para adaptarse a los cambios y ganar competitividad.
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