Las organizaciones pueden contribuir positivamente a este escenario, cumpliendo a cabalidad la normativa del teletrabajo y fomentando la sociabilización.

Las clases en línea pasaron a ser algo cotidiano en la rutina de nuestros niños y jóvenes estudiantes en general. Y en el ámbito laboral, el teletrabajo y la utilización de herramientas como Zoom, Meet o Teams ya forman parte de nuestro día a día. Sobre este último punto, cabe preguntarse cómo una persona puede compatibilizar el hecho de teletrabajar con su vida familiar.

Luciano Flores, gerente de Consultoría y Capacitación de HumanNet, afirma que “ha existido una suerte de capilarización de la oficina en la casa. Ya no sólo de manera parcial o esporádica, pues son muchas las personas que hacen de su hogar una oficina. En definitiva, se trata de un modelo que llegó para quedarse”.

Al respecto, el experto entregó una serie de recomendaciones con miras a compatibilizar esta nueva forma de trabajo con la vida en familia:

1. Reconocer la propia realidad. Dado que las familias son diversas en estructura, número, edades y capacidades de sus miembros, el experto de HumanNet aconseja como primer paso analizar la realidad del núcleo que se tiene. “Es decir, no hay que olvidar que existen familias numerosas, con o sin niños, adolescentes, adultos mayores, personas con necesidades especiales, etc.”. Un segundo paso consiste en evaluar las condiciones de infraestructura que se poseen en el hogar, ya sea en materia de espacio físico, equipamiento o conectividad, por ejemplo. Considerando lo anterior, es posible administrar una rutina y planificar las tareas o roles que cada integrante asumirá en la casa. Para esto último se debe tener en cuenta las edades y habilidades de cada integrante.
2. Comunicación clara y permanente. Otro tip que entrega el profesional apunta a mantener una comunicación fluida entre los miembros del grupo familiar, en cuanto a las actividades laborales o educativas y horarios que tenga cada uno en la semana. La sugerencia es aprovechar instancias como los almuerzos o cenas para compartir y escucharse. De esta manera los niños pequeños, por ejemplo, sabrán en qué horarios los padres estarán trabajando conectados y en qué momentos del día podrán jugar con ellos. Lo mismo se aplica a quienes estudian. Esto también ayudará a distribuir mejor las tareas relacionadas con el hogar. En caso que las relaciones interpersonales estén deterioradas la recomendación es recurrir a los servicios de un profesional o terapeuta familiar, o algún mediador que apoye a un sistema que ya venía disfuncionalmente interactuando.
3. Potenciar la tolerancia y empatía. Un tema importante que deben considerar los miembros de una familia es que no todos los días serán iguales y que habrá algunas jornadas no tan buenas como las demás para cada uno de los integrantes. “Ahora los miembros de la familia conviven todo el día, lo que lleva a regular las expectativas sobre cómo el resto de las personas se van a comportar diariamente. Entonces los espacios de pausa son tremendamente necesarios. Hacer una pausa cada cierto tiempo, ya sea para comer o beber algo, hacer una llamada telefónica, hacer algo de ejercicios o simplemente caminar, ayudan a despejar la mente y recuperar energías para una mayor concentración”.
4. Destinar tiempo al ocio y a la recreación. Los fines de semana, señala Luciano Flores, lo ideal es que cada miembro pueda llevar a cabo actividades en familia con el fin de estrechar lazos, relajarse o simplemente recrearse, ya sea a través de juegos de mesa, actividades al aire libre o simplemente viendo alguna película.
5. Entender que es una situación que afecta a todos. Un punto clave en esta materia es comprender que la pandemia y las restricciones de movilidad que ella impone es un problema que afecta a todo el mundo y no sólo a mi persona. Por ende, cada individuo debe hacer su mejor esfuerzo y compromiso para llevarse mejor con el resto del grupo familiar.

A nivel de empresas, el ejecutivo de HumanNet manifiesta que las organizaciones pueden contribuir positivamente a este escenario, cumpliendo a cabalidad la normativa del teletrabajo y trabajo a distancia y fomentando ciertas actividades de sociabilización que pueden hacer más llevaderas las jornadas laborales, ya sea organizando desayunos o happy hour virtuales o entregando herramientas prácticas a través de webinars o talleres en línea, con el fin de que sus colaboradores aprendan técnicas para manejar el estrés, mejorar la comunicación familiar, superar situaciones conflictivas y se genere la contención emocional que muchos hogares pueden estar necesitando.

Asimismo, es importante que en las empresas se respeten los horarios de trabajo, para que los empleados cuenten con su derecho de desconexión.