Descubra lo que el biógrafo de Steve Jobs, Albert Einstein y Benjamin Franklin tiene que decir sobre el asunto.
Los genios no son personas imposibles de categorizar o clasificar. Son singulares y también incomparables. Analizando la obra del biógrafo Walter Isaacson, quien escribió biografías sobre Benjamin Franklin, Albert Einstein y, recientemente, Steve Jobs; Issie Lapowsky, de Inc., destaca algunas características que todos ellos tienen.
Isaacson describe 5 rasgos de personalidad que, según él, tienen estos genios:
1. Sienten pasión por la perfección: Lo más importante que hay que saber de los genios, no tiene nada que ver con el intelecto. Porque personas inteligentes, que descubrimos en nuestra vida, existen muchas. Sin embargo, la dificultad está en encontrar personas que piensan diferente, que son creativas.
"Una de esas diferencias es que genios, como Jobs por ejemplo, son extremadamente perfeccionistas. Cuando niño, Jobs ayudó a su papá a crear una pequeña cerca, y se le enseñó que el frente debería ser tan bello como la parte de atrás. La preguntó a su papá por qué era así, si nadie sabría la diferencia, y su padre le respondió: "tú sabrás". Esa lección la tomó para el resto de su vida, incluyendo su carrera en Apple, donde encontraba defectos en los circuitos internos del computador, cosas que nadie veía", revela el biógrafo.
Y eso, para Isaacson, hacía de Jobs un genio. "Un artista verdadero se preocupa hasta de los detalles que nadie ve. Si quiere crear una empresa que sobreviva a todo, enfóquese en hacer buenos productos. Un buen producto va traer ganancias, y no lo contrario", dice.
2. Aman lo simple: La belleza de los productos de Apple es la simplicidad, lo que, de acuerdo con Isaacson, también es una obsesión de los genios. "Cuando Jobs estaba trabajando en el iPod, estaba empecinado con el hecho de las personas consiguieran cualquier música con sólo apretar tres clicks. Él le dijo a su equipo: 'No me lo muestren a menos que puedan hacerlo en tres clicks'", afirmó Isaacson.
Desesperados por mantener las cosas simples, el equipo creó el botón donde no se necesitarían los clicks, sino que sólo deslizando los dedos por este. Ese botón estaba dentro de los parámetros de simplicidad de Jobs. "Los botones de apagado, sin embargo, no lo eran. '¿Por qué necesitamos cosas tan grandes?, él decía. La respuesta, como sabemos, no es necesaria", comenta el biógrafo.
3. Creen en quienes los rodean: "Steve podía ser un imbécil dentro del ambiente laboral, pero tenía a su alrededor personas extremadamente confiables, porque conseguiría llevarlos hasta un nivel de excelencia jamás imaginado por ellos", dice Isaacson.
El truco de Jobs, relata Issie, consistía en no dar importancia a las vacilaciones de otras personas. "Cuando un empleado intentaba decirle que algo era imposible, él simplemente lo miraba fijamente y decía:' No tenga miedo, usted lo conseguirá", dice. Con esa táctica, por ejemplo, consiguió restar 10 segundos al encendido del Macintosh. A fin de cuentas, el equipo entero consiguió restar 28 segundos. "Jobs llevaba a las personas a la locura, pero también las llevaba a hacer cosas que ellos encontraban imposibles", complementa Isaacson.
4. Desafían a otros genios. Albert Einstein vino siglos después de Isaac Newton, uno de los más grandes científicos de todos los tiempos. Sin embargo, al desafiar las teorías de Newton, revela Isaacson, es que Einstein descubrió la teoría de la relatividad. "Newton dijo que el tiempo corre segundo por segundo, sin importar la manera en que observamos. Sin embargo, Einstein se rehusó a aceptar esa teoría como verdad absoluta y desarrolló la teoría que reveló que el tiempo, en realidad, es relativo a nuestro estado de movilidad. Esa capacidad de pensar fuera de la caja, de ser diferente, es lo que hace de Albert Einstein lo que fue", dice.
5. Aprecian la diversidad: Según Isaacson, Ben Franklin tenía una característica que las personas difícilmente asocian con la palabra genio. Él era tolerante. "Entendía que una sociedad con gran diversidad, donde todos son tolerantes, es una sociedad más fuerte", dice el biógrafo.
Con la tolerancia viene la humildad y la habilidad de oír las opiniones de los otros. "Los mayores inventos vienen de grupos que se ayudan, donde las debilidades son cubiertas por las fortalezas de los otros y los puntos fuertes se combinan", revela Isaacson. "Diversas veces usted ve en la inteligencia de Benjamín Franklin la fuerza para aproximar a las personas. Esto es parte de su genialidad", complementa.
