Para algunas personas es más fácil que para otras, solo se necesita voluntad y planificación.
¿Cómo desconectarse de la oficina? Para lograrse existen ciertos pasos que pueden ayudar. Lo cierto, es que para algunas personas es más fácil que para otras, pero no es difícil, solo se necesita voluntad y planificación.
Desde HumanNet Consultores comparten algunas recomendaciones:
- Planificar el viaje. Quienes salgan de su ciudad deben, primero que nada, programar su recorrido con el objeto de no dejar nada al azar, para evitar sorpresas o imprevistos que puedan arruinar el viaje. Esto significa revisar el vehículo antes de partir, chequear los implementos de seguridad, documentos, llevar el vestuario adecuado para la estadía, etc. Si se viaja en avión, hay que prestar también atención a los detalles de la documentación y logística.
- Apagar el celular. Una vez en el lugar de descanso, el trabajador debe apagar completamente su teléfono como una forma de estar desconectado de la oficina. También puedo dejarlo off-line o sin conexión, si es que el aparato lo usa como consola de juegos. Es útil distraerse para descansar y tratar de dejar un rato fuera las rutinas.
- Dormir lo necesario y tomar una siesta. Otra manera de salir de la rutina es levantarse más tarde y reposar luego del almuerzo. Esto permitirá descansar el cuerpo y la mente.
- Alimentarse adecuadamente. Hay que priorizar los alimentos saludables, como por ejemplo incorporar los vegetales para incluso cocinarlos a la parrilla (ricos en fibra, minerales y vitaminas). Como habrá más tiempo para desayunar y almorzar en esos días, lo ideal es dejar de lado aquellos productos altos en azúcares, grasas saturadas y exceso de sodio. También hay que beber bastante agua cristalina. Disfrutar las empanadas y los asados está bien, pero ojo con las calorías y el exceso de bebidas alcohólicas.
- Leer y escuchar buena música. Un buen libro, un buen concierto, o incluso una agradable sinfonía puede llevar nuestra mente a instancias de relajo y distracción que nos harán más gratos los días de descanso. Hay que aprovechar de hacer las cosas que nos gustan y que no son habituales.
- Realizar actividad física. Caminatas, salir a recorrer el entorno, o hacer algún tipo de deporte recreativo, ayudarán a mantenernos en forma y activos, facilitando que nuestra mente también se oxigene.
La preparación del retorno también juega un papel importante en este tema, pues si no se planifica bien el regreso, algún olvido o imprevisto puede generar más tensión o estrés en el trabajador y su grupo, lo que sin duda hará olvidar, rápidamente, los gratos días que se vivieron en familia.
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