Que el cuerpo no contradiga lo que se está diciendo y ser elocuente, es fundamental para entregar una buena impresión de lo que se está exponiendo en este tipo de clases, que están haciendo furor en plataformas como Youtube.
Una celular o una cámara más un espacio físico- independiente de sus características arquitectónicas- eran los implementos básicos que necesitaba un profesor para poder compartir una clase gratuita a través una plataforma como Youtube o Unicoos.com. Incluso, no se necesitaba tener tanto manejo ante las cámaras para ser parte de esta tendencia. Sin embargo, actualmente y debido a la gran oferta que ofrece el mercado y las exigencias de los usuarios, la necesidad de mejorar día a día a hecho que los académicos se preocupen de cada detalle desde la importancia de los tiempos, la voz, la vestimenta y los movimientos.
Ante esto, el periodista, profesor y autor del “Manual práctico de vocerías” y co-autor de “Cómo hablar, improvisar y leer en público”, Héctor Velis-Meza, entrega siete consejos para mejorar el desplante de quienes van a exponer a través de un video.
1. La administración del tiempo es esencial. Hay que acostumbrarse a pensar y hablar en los tiempos que se asignan para este propósito. Por lo tanto, los videos académicos siempre deberían ajustarse a un guión.
2. El lenguaje que emplee el profesor-conductor de la clase debe ser claro, accesible a la mayor cantidad de gente, directo y variado. Cuando sea necesario explicar conceptos especializados, estos deben aclararse brevemente.
3. El profesor-conductor debe tener siempre presente que en una clase, el lenguaje oral se emplea para exponer las materias y el lenguaje gestual entrega una actitud frente a lo que se está exponiendo. Esto significa que el cuerpo nunca debe contradecir lo que se está diciendo.
4. La elocuencia y expresividad del profesor-conductor son fundamentales. Debe transmitir seguridad, convicción y entusiasmo por lo que está haciendo en el set. Debe dejar muy claro que es experto en lo que enseña. Sus movimientos deben ser armónicos y proyectar tranquilidad y equilibrio hacia los destinatarios de su clase. Nunca se debe caer en la tentación del histrionismo exagerado; las morisquetas, la gesticulación excesiva, los tarareos y la emisión de sonidos extraños, que se pueden divertir en algunos instantes, pero terminan por cansar.
5. Al emitir la voz hay que mover los labios, pero sin exageración, para ayudar a la comprensión de lo que se está diciendo. A mucha gente no se le entiende lo que dice porque emite la voz con la boca casi apretada y pierde el aire de los pulmones, por mala respiración. Para sostener la voz y no perder volumen hay que acumular aire en la base de los pulmones y no en la parte superior.
6. Con respecto al vestuario, el sentido común aconseja que la ropa debe ser congruente con lo que se representa y se dice. Pese a que hoy existe mucha libertad con respecto a este tema, nunca hay que olvidar que el vestuario continúa siendo un complemento de la expresión oral. En la elección del vestuario, se aconseja aprender el arte de disimular los defectos y carencias y destacar las cualidades.
7. El profesor-conductor de una clase que se dicta a través de la web no tiene alumnos en la sala, sino en distintos lugares. Como no puede mirarlos, porque no están presentes, debe acercarse a ellos hablándole con naturalidad a la cámara; ésta representa su audiencia.
