Crear equipos diversos, entender las motivaciones individuales y fomentar la comunicación y retroalimentación, son algunas de las recomendaciones.
Como ya se ha mencionado, en las empresas conviven varias generaciones. El asunto es cómo éstas se pueden relacionar entre ellas y la empresa, por otro lado, aprovechar el talento de cada generación.
Todd Berger comentó en Entrepreneur.com que de acuerdo a la Oficina de Estadísticas Laborales en Estados Unidos, en 2022, el 25% de la fuerza laboral estará compuesta por Baby Boomers y 46% por Millennials.
Berger propone siete acciones que pueden reducir esta brecha:
1. Crear equipos diversos. Los gerentes pueden tomar la ruta fácil y reunir en un grupo a personas de la misma edad. Al hacer esto se está perdiendo toda oportunidad, porque cada generación puede aprender habilidades del otro. Diferentes experiencias y antecedentes pueden provocar diversas soluciones y discusiones.
2. Entender motivaciones individuales. Los gerentes no siempre se dan cuenta que los empleados tienen diferentes motivaciones. Así que cuando se establezcan metas e incentivos, es conveniente analizar cómo un problema puede ser experimentado por ciertos empleados. Se puede generar un problema cuando un incentivo se orienta más hacia a una generación que a otra.
3. Considerar la funcionalidad. Es importante trazar metas que sean realistas para el grupo entero, sin importar la edad. Cuando se establecen metas que favorecen a un grupo generacional, se pueden generar problemas, como la frustración.
Puede que los miembros de una generación no tengan problema con trabajar largas horas, pero es cómo se resuelve el trabajo lo que puede causar problemas. Los Millennials pueden terminar un proyecto desde su teléfono celular mientras viaja a casa, mientras que un Boomer puede terminar ese mismo proyecto sentado en su escritorio, retrasando su llegada a casa con su familia.
4. Generar lazos mediante eventos y reuniones. Ya sea estableciendo una reunión semanal o mensual, los gerentes deben encontrar algo que cada empleado aprecia y disfruta. Es recomendable también invitar a los empleados a aprender algo nuevo, que sea significativo para todos, y que puede ayudar a generar lazos. Para eso, encuentre un asunto en que el equipo sea débil y ofrezca una formación adecuada. Esto ayuda a que los empleados conozcan mucho más a sus compañeros.
Es igualmente aconsejable llevar a cabo evento en la empresa donde se invite a personas que sean significativas para los empleados, como cónyugues o hijos.
5. Cambiar las estaciones de trabajo. Mover a los empleados a otros escritorios puede provocar nuevas conversaciones y amistades que, probablemente, no surgirían sin este cambio.
6. Fomentar la comunicación y retroalimentación. Es conveniente instar a los empleados para que den su opinión.
7. Practicar la mentoría inversa. Mientras las habilidades duras pueden ser propias de ciertas generaciones, como la experiencia en social media de los Millennials o el conocimiento específico en alguna industria de parte de los Baby Boomers, el trabajo también requiere de las habilidades blandas. La realidad es que los recién graduados carecen de habilidades de comunicación si se trata de hablar con clientes o para dar una presentación.
A través de un programa formal de mentores, los Millennials pueden aprender este tipo de habilidades blandas de profesionales de alto nivel, que han pasado por ciertas situaciones. Por otro lado, los Baby Boomers quizás podrían aprender de algunos Millennials, que tienen más habilidades sociales de colaboración y son abiertos al cambio.