Una organizadora profesional de espacios te explica cómo puede ordenar tu ropa y aprovechar el tiempo que debes pasar en casa.
Gobiernos a nivel mundial han tomado medidas drásticas para contener la pandemia del coronavirus. En Colombia, el presidente Iván Duque decretó cuarentena total desde el 25 de marzo y hasta el 13 de abril. Ya que muchos estaremos varios días en casa podemos aprovechar para ver series, aprender cosas nuevas, leer los libros que tenemos pendientes y hacer tareas que, por falta de tiempo, siempre posponemos.
Entre esas tareas se encuentra arreglar todas las prendas, zapatos y accesorios del clóset. Por eso, hablamos con Liliana Ramírez, organizadora profesional de espacios y creadora de la página Get Simple, para que nos contara su experiencia y nos diera algunos consejos para dejarlo perfecto.
Cuando estaba creando Get Simple creó una lista con sus habilidades. Una de las que sobresalió fue "ser organizada". "Empecé a decir qué puedo hacer con esto, armé el negocio y lo primero que hice fue ayudar a la gente a guardar la Navidad por sabía que a la gente no le gusta hacerlo. Ofrecí un servicio innovador".
El emprendimiento Get Simple lo creó hace cuatro años para que la gente tuviera una vida, recuerda Ramírez, "más armoniosa porque el orden da tranquilidad, felicidad, calma y armonía en la casa".
Después estudió y consiguió un certificado como especialista en organización residencial de la National Association of Productivity and Organizing Professionals (Napo, en inglés). Luego de recibir el certificado decidió ampliar sus servicios. Incluyó oficinas, clósets, cocinas, entre otros. Ramírez tiene su propia metodología de trabajo, así que estos son sus consejos para arreglar el almario:
1. Descarta, depura o hazle un détox al clóset. No puedes organizar tu clóset con las prendas que no utilices porque estás perdiendo tiempo. Es difícil el "descarte consiente" porque hay que hacer un desapego. No es fácil. Desligarse y despedirse es difícil, pero necesario.
2. Pregúntate. ¿Hace cuánto la usaste?, ¿la usaste en el último año?, ¿te queda bien?, ¿está en buenas condiciones?, ¿si la ves en una tienda la volverías a comprar? Es importante aterrizar en el presente. ¿Hoy te pondrías esa prenda?
3. Dona, regala o vende. Si es una camisa de uso diario y no te la estás poniendo es porque la reemplazaste y ya no es tu favorita así que ponla a circular. ¡Dale una segunda oportunidad! Déjala ir y permite que tenga otro uso.
4. Asígnale el lugar apropiado a cada prenda. Toda tu ropa debe tener un lugar, pero hay que darlo con coherencia. Entre más lo uses debe estar en un espacio con mayor acceso. Por ejemplo, la ropa interior que usamos todos los días, debe estar en el cajón que te quede más fácil de abrir. Así las cosas, lo vas a devolver a su lugar con más facilidad y se convertirá en un hábito más fácil.
5. Optimiza el espacio. Muchas personas no saben lo que tiene por todas las dimensiones de su clóset. Aprovecha la pared del cuarto o del clóset para colgar correas o collares; divide internamente los cajones para que sepas lo que tienes; dobla la ropa de forma vertical como papeles de archivo; y, utiliza un zapatero de niveles para aprovechar el espacio hacia arriba.
6. Organiza las prendas por colores. Tiene tanto ventajas como desventajas. Algunas de las ventajas es que encuentras la ropa más fácil y puedes hacer combinaciones. Pero su mantenimiento demanda más tiempo. Si tú no te comprometes, en un mes el clóset volverá a estar desordenado.
7. O por categorías. Los pantalones en un bloque, en otro las chaquetas, en una caja las medias, etc. Las blusas las puedes colgar y clasificar por el largo de la manga para encontrarlas más rápido.
8. Unifica los ganchos. Todos deberían ser del mismo color e iguales por dos razones: se verá más estético y por practicidad.