El jefe de Asuntos Médicos y Científicos para América Latina de Pfizer destaca la importancia de ellas puesto que han permitido mantener a raya a diversas enfermedades durante años, mismas que ahora vuelven a resurgir en parte por los llamados grupos anti vacunas.
Las tendencias a la no vacunación siguen cobrando fuerza en el mundo y eso ha posibilitado, en parte, que resurjan enfermedades que estaban casi desapareciendo, como es el caso por ejemplo del sarampión o la difteria. La primera estaba cerca de extinguirse en Europa, pero este año se han registrado importantes brotes que justamente coinciden con una menor tasa de vacunación, que podría atribuirse con un avance de los grupos anti vacunas. En Estados Unidos, ocurre un fenómeno similar y en América Latina también ha habido una reducción en las inmunizaciones.
Estos grupos anti vacunas critican los efectos secundarios que muchas de las vacunas provocan, algunos plantean que no es necesario continuar con su implementación, por el hecho de proteger para males ya casi desaparecidos. Otros continúan apoyando la teoría de que las vacunas pueden provocar autismo, como el caso de las que contienen aluminio. Aunque no se ha demostrado que el aluminio en las inmunizaciones sea perjudicial.
La importancia de la vacunación es algo que recalcan muchos médicos y la Organización Mundial de la Salud (OMS), ente que señala que la inmunización previene cada año entre 2 y 3 millones de muertes por difteria, tétanos, tos ferina y sarampión. El Dr. Alejandro Cané, jefe de Asuntos Médicos y Científicos para América Latina de Pfizer, es un firme defensor de las inmunizaciones y se declara un “activista de las vacunas”.
- ¿Por que cree que son importantes para la salud?
- Yo creo que existen 3 certezas. Como dijo Hillary Clinton, la tierra es redonda, el cielo es azul y las vacunas funcionan. Las vacunas funcionan al mismo nivel que el agua potable. Estas son las dos herramientas más importantes que hemos tenido en los últimos 150 años en la humanidad y que cambiaron la historia... En este mundo se moría gente de viruela, teníamos 380.000 casos de poliomielitis en la década del ‘50 por año y hoy tenemos 7. ¿Qué cosa cambió? La utilización de una vacuna, no hay más viruela del año ‘79, estamos pronto de erradicar la poliomielitis y el beneficio es la vacuna.
- ¿Por lo general, son seguras?
- Para que una vacuna pueda llegar a ser parte del mercado, la produzca quien la produzca, un laboratorio privado, público, o un joint venture entre privados y públicos, tiene que ser segura primero que nada, y la seguridad la demuestran un montón de estudios clínicos que se hacen antes que la vacuna llegue al mercado, razón por la cual es muy poco probable y poco basado en la evidencia decir que una vacuna puede producir un daño. Creo que la información disponible en toda la bibliografía que está publicada y accesible muestra que las vacunas son seguras y eficaces y contra eso no hay ninguna otra verdad.
- ¿Y por qué muchas personas ven ahora con malos ojos a las vacunas?
- Lo que no podemos perder de vista es que las vacunas son presa de su propio éxito, y el hecho de no ver la enfermedad hace que a veces prevalezca la percepción del efecto asociado al efecto adverso, la fiebre por la vacunación, o la complicación por la vacunación. Ocurre y ocurre con todas las herramientas de salud pública, pero no hay nada en ninguna de las evidencias que están disponibles...que digan que las vacunas pueden ser riesgosas o están asociadas al daño.
- ¿Qué ocurre con la asociación de éstas con el autismo?
- El ejemplo del autismo que está vinculado a la vacuna antisarampionosa está demostrado que la persona que publicó ese artículo asociando la vacuna para el sarampión con el autismo está preso, tuvo que pagar una multa y retractarse porque había fraguado la información que había utilizado para publicar ese estudio clínico.
- Muchos médicos no recomiendan vacunarse, ¿no le parece un contrasentido?
- A veces el tema de la información médica no es la adecuada también... los pediatras cuando empezamos a hacer la residencia de pediatría, formación, lo primero que te dan es un manual de vacunación y un manual de puericultura, porque la vacunación es parte de tu día a día, lamentablemente y cada vez menos, se empezó a cambiar el currículo médico que no incluye el capítulo de vacunas como parte de la farmacia, entonces si no te dedicas a la pediatría o infectología o estas interesado en vacunas no aprendes, y eso hace que desconozcas... las sociedad médicas han trabajado un montón y muchas universidades han agregado la vacunologia a la parte de formación de grado, pero bueno, todavía nos falta mucho camino por recorrer.
- La gente es reacia a las vacunas, no así a usar fármacos...
- Porque cuando uno tiene la dolencia, es una opinión personal, cuando se tiene dolencia o enfermedad, busca curarse para sentirse mejor, pero cuando uno está sano, la percepción de que algo malo le puede pasar es baja y uno prioriza ciertas cosas y desatiende, ahora cuando uno magnifica el riesgo, yo siempre digo lo mismo… aquí en Argentina no se usaba cinturón de seguridad para manejar, hasta que por ley se estableció y te ponían una multa carísima si no usabas cinturón. Hoy todos lo hacen... mis hijos suben al auto y se lo ponen y si no me lo pongo me dicen papá, te tienes que poner el cinturón. Con las vacunas es igual, es una cuestión de conciencia social, es saber que te proteges tú, tu familia y la comunidad, entonces no usarla no tiene excusas.
