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El inicio de una nueva etapa para las empresas españolas en Argentina
Vie, 06/04/2018 - 09:13

Juan Carlos Martínez Lázaro

La crisis 2.0
Juan Carlos Martínez Lázaro

Profesor de economía del IE Business School.

La visita que va realizar el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, a Argentina, esta semana, va a suponer un importante impulso a las relaciones bilaterales. Unas relaciones que han mejorado sensiblemente desde la llegada de Mauricio Macri a la Presidencia de Argentina, dando por superada la etapa de turbulencias políticas y económicas que se vivieron durante el periodo kirchnerista.

Hoy, la situación económica de los dos países está mejorando de forma notable. Tras una devastadora crisis, España acumula cuatro años de crecimiento, los tres últimos con tasas superiores al 3%. Gracias a esas cifras, se ha conseguido recuperar el 70% de los empleos destruidos durante la crisis, aunque todavía será necesario crear más de un millón de puestos de trabajos más para volver a los niveles de empleo que había en 2007. Algo, que de cumplirse las previsiones, debería ocurrir en 2020.

Por su parte, la situación económica también mejora en Argentina. Luego de la contracción que experimentó en 2016, la economía argentina creció el año pasado por encima del 2% y las previsiones para este año y el siguiente superan el 3%. La inflación, aunque a un ritmo más lento del pronosticado, se va reduciendo. Y lo más importante de todo, Argentina ha vuelto a ser un país confiable desde el punto de vista de la inversión extrajera.

En la agenda de la visita, aparte de cuestiones políticas, predominan los asuntos económicos, como el estado de las negociaciones del Acuerdo Mercosur-UE, que se espera que pueda estar aprobado en breve. Pero, además, el presidente Rajoy viaja acompañado de una delegación de empresarios españoles que participarán en un Encuentro Empresarial con sus homólogos argentinos, para explorar nuevas líneas de colaboración económica entre los dos países. Una colaboración que la nueva administración argentina está interesada en potenciar, mediante la captación de nuevas inversiones españolas. El pasado mes de noviembre se celebró en las instalaciones del IE Business School en Madrid un Foro sobre Economías regionales y oportunidades de inversión en Argentina, que despertó un gran interés entre potenciales inversores españoles. En dicho Foro, responsables del gobierno de la Nación y de distintas provincias, expusieron los programas y facilidades que se ofrecen a las empresas que quieran instalarse en sus respectivos territorios.

Este renovado interés de los empresarios españoles por invertir en Argentina, también lo hemos detectado en la última edición del Informe “Panorama de la inversión española en Iberoamérica”, que realizamos en el IE Business School desde hace once años y que presentamos recientemente en Madrid. Hasta 2015, las empresas españolas pensaban que la situación económica en argentina era bastante mala y sólo superaba a la de Venezuela. Pero en el Informe de 2016, la percepción empezó a mejorar. Y en el Informe correspondiente a 2018, no sólo la economía argentina se percibe como una de las más estables de Iberoamérica, sino que, por primera vez, aparece como un destino en que las empresas españolas tienen previsto incrementar sus inversiones durante este año. Además, el país ya no es destacado cuando se enumeran los riesgos potenciales que acechan a esas inversiones, cuando hasta no hace mucho los empresarios españoles veían amenazadas sus negocios argentinos por factores como el tipo de cambio, la desaceleración económica, la inestabilidad política o la inseguridad jurídica.

A esta línea de mejora de la percepción también se ha sumado la ciudad de Buenos Aires. Cuando hemos preguntado a directivos y empresarios sobre cuales consideran que son las ventajas más destacables de las principales metrópolis iberoamericanas, la capital porteña, obtiene la segunda mejor puntación empatada con Santiago, en una clasificación que lidera Miami. Hasta hace no mucho, Buenos Aires no era considerada como un destino atractivo en el que trabajar y residir.

En la década de los 90 del pasado siglo las empresas españolas empezaron a invertir masivamente en Argentina, al detectar grandes oportunidades de negocio. Actualmente se calcula que más de 300 compañías españolas operan en el mercado argentino, algunas de ellas en sectores de gran relevancia económica. La inversión española, es la segunda en importancia tras la de Estados Unidos y su stock se cifra en torno a los US$6.000 millones. Argentina pasó de ser uno de los destinos más atractivos para la inversión española, a un país que se percibía problemático desde el punto de vista económico y el que la seguridad jurídica no estaba garantizada. Ello motivó que muchas empresas españolas desviaran sus proyectos de inversión hacia otros mercados de la región más estables y más confiables. Hoy, la nueva administración argentina se ha fijado como objetivo estabilizar la economía, reduciendo los desequilibrios económicos, y reinsertar al país en los mercados de capitales y en los flujos de inversión extranjera. En este nuevo escenario, las empresas españolas van a volver a jugar un papel importante en el desarrollo futuro de Argentina.

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