Actualmente, las empresas que cuentan con madurez digital −sólo el 10% a nivel mundial− están creciendo cinco veces más que sus pares, a pesar de que estamos en tiempos de crisis. Dentro de ese contexto, los líderes de negocio que quieran sobresalir en el mercado deben tomar en cuenta cuatro nuevas realidades que están forjando el nuevo mundo post pandémico.

La primera nueva realidad es la experiencia humana. 8.000 millones de personas en todo el mundo han cambiado instantáneamente su comportamiento. Nunca había ocurrido algo así en la historia de la civilización humana. Producto de la pandemia, las compras online tuvieron un crecimiento explosivo de más de 300%. Y pensemos en la forma virtual en que trabajamos y nos comunicamos con la familia, los amigos y los colegas. Este es el nuevo modo de interacción. El caso de Chile no es diferente: de acuerdo con un estudio reciente de Accenture, al consultarle a los chilenos cómo sociabilizaría los próximos meses, 70% dijo que se conectaría virtualmente con sus amigos, mientras 51% que estaba usando más plataformas virtuales para recibir servicios de salud. Aún no hemos apreciado lo que esto significa realmente para la experiencia humana y es algo que todos debemos comprender profundamente y reflexionar sobre cómo avanzar.

La segunda realidad es que hoy, producto de la pandemia, todo negocio es tecnológico. Ante esto, para ser un líder en lo digital, para abordar esa brecha de logros de la que hablé, es necesario ser tan bueno en tecnología como los nativos digitales. Todo el mundo debe tener esa capacidad tecnológica; todas las empresas deben ser organizaciones digitales. La tecnología es la línea de vida que ha mantenido las cosas funcionando durante la crisis.  Si el COVID-19 hubiera ocurrido hace cinco años, habría sido mucho más devastador, con consecuencias mucho más graves, dado el estado de la tecnología.

La tercera realidad es el nuevo entorno de trabajo. La buena noticia es que no vamos a trabajar desde casa para siempre. Está surgiendo el trabajo híbrido, digital y presencial. El futuro laboral será independiente de la ubicación y del tiempo, asíncrono. Impulsado por los datos para capturar la información de diferentes maneras, hiper-automatizado para sacar lo mejor de las personas y centrado en el ser humano para mejorar realmente el potencial de los empleados que tenemos.

La cuarta nueva realidad es la sostenibilidad. La tecnología entrelazada con la sustentabilidad es una parte clave del nuevo mundo que nos ha dejado la pandemia, que todos tenemos que incorporar en la forma en que estamos operando y cómo estamos guiando nuestros negocios en el futuro. Tecnología y sostenibilidad deben ir de la mano en la estrategia de negocio. La sostenibilidad es el “nuevo digital”.

Estas realidades se deben incorporar en nuestra forma de hacer negocios. Hoy tenemos la oportunidad única en una generación de replantear la forma en que hacemos empresa. Avancemos hacia ese futuro ahora.