El mundo de los restaurantes y comercios vivieron un gran impacto durante la pandemia en donde tuvieron que necesariamente modificar la venta de sus productos a una más digital o por agregadores (apps delivery) para poder seguir adelante con su funcionamiento. De a poco los comercios han visto la importancia de tener un canal propio para conectar con sus clientes y empoderar su negocio. Con ello, el cliente generó un tipo de conciencia colaborativa, que se ha mantenido en el tiempo, donde quiere ayudar y dar soporte a pequeños, medianos y grandes negocios a través de la compra directa en sus sitios web. Ven el esfuerzo que hacen, y saben que realizando la compra a través de sus sitios propios les genera mayor rentabilidad.

En esa línea, hemos visto que algunos restaurantes y comercios han logrado una rentabilidad de un 66% adicional de lo que ganaban antes, solo empoderando su canal directo y no entregando el poder y control a las apps delivery. Esto claro, no es un comportamiento que surgió de la noche a la mañana, los agregadores siempre existirán e irán renovándose, pero la industria entiende que lentamente son sus propios e-commerce los que tendrán la tracción de la mayor parte de sus ventas.

En cuanto a las ventajas del canal propio hay varias, tales como centrar al negocio al núcleo de todo. La omnicanalidad siempre va a existir como un complemento a los planes comerciales, pero sabemos que el canal propio es el que más tracciona en la rentabilidad de los negocios si es que se pone el foco en él. Por esto mismo, el desafío será construir una marca relevante en el mercado, que entregue una propuesta de valor interesante a los usuarios y que éstos, lo identifiquen como tal. Es un proceso complejo pero totalmente alcanzable. La balanza del 80-20 de canales externos vs canal propio ya comenzó a darse vuelta. Y eso es una buena señal.

¿Por qué es una buena señal? El mundo gastronómico se acostumbró a un boom muy competitivo con agregadores y que prácticamente la ganancia por producto se reduce a un mínimo y es muy difícil proyectar crecer si la rentabilidad es baja. Queremos volver a lo que era antes, que los restaurantes conecten con su cliente y usuario tanto online como físico. Es que los restaurantes sepan qué es lo que el cliente busca y qué prefiere.

Si tuviera que darle un consejo a un emprendimiento que quiere realizar un e-commerce, es que no se compliquen. Hay soluciones como Justo, que entrega herramientas tecnológicas, para subirse al mundo online y lanzarse a alcanzar nuevos clientes. No existe el requisito de saber de tecnología, pero sí debe haber un compromiso de empujar su canal propio y de querer aprender las herramientas que les otorgamos desde el monitoreo comercial y acciones de marketing para la toma de decisiones.

Para finalizar, en los próximos años, según nuestra experiencia, los canales propios serán uno de los cuales más se utilice a la hora de pedir un producto, o un plato de comida, y que de esta forma el cliente y el usuario tenga esa virtud de poder apoyar estos canales, y no a través de un intermediario. Si empresas pequeñas, medianas o grandes no ven valor a su canal propio, es porque el modelo de negocio no lo han conceptualizado hasta el momento. Claro que existen un sinfín de opciones para vender, pero si no se pone foco en el canal propio, la rentabilidad nunca será eventualmente la esperada.