Durante la inauguración del evento Aviation Festival Americas 2022 en junio 7 al 8 del 2022, tuve la oportunidad de hablar sobre los principales desafíos que enfrentarán las aerolíneas en el segundo semestre de este año, siendo la volatilidad en los precios del combustible para aviones uno de los principales, sobre todo cuando se espera que los precios del combustible de aviación se mantenga elevados a lo largo de 2022.
Recientemente, tuve la oportunidad de realizar un benchmark para un cliente que consideraba varias estrategias para protegerse de los incrementos en los precios del combustible de aviación. Al realizarlo se observa que el promedio en el segundo trimestre del 2022 para aquellas aerolíneas que no usaron coberturas de combustible fue de US$ 3,8 por galón.
[rebelmouse-image 30034833 is_animated_gif=false crop_info="%7B%22image%22%3A%20%22https%3A//assets.rbl.ms/30034833/origin.jpg%22%2C%20%22thumbnails%22%3A%20%7B%22origin%22%3A%20%22https%3A//assets.rbl.ms/30034833/origin.jpg%22%2C%20%222000x1500%22%3A%20%22https%3A//www.americaeconomia.com/media-library/eyJhbGciOiJIUzI1NiIsInR5cCI6IkpXVC..." dam="0" site_id=20917490 pin_description="" original_size="847x550" expand=1] Gráfica 1. Reportes financieros de aerolíneas seleccionadas. Adj.: Ajustado. E: Estimado. T: Trimestre. Análisis consultor
Para las aerolíneas, el impacto en la subida de los precios del combustible de aviación es claro y ataca directamente su rentabilidad. Por ejemplo, en el caso de United Airlines por cada dólar adicional que aumente el precio del barril de combustible para aviones su gasto anual de combustible aumentaría en US$ 102 millones, asumiendo niveles de vuelo similares a los de 2019.
Por lo tanto, reposicionar la estructura de costos de una aerolínea al nivel más bajo se ha vuelto más importante que nunca a medida que los precios del combustible para aviones continúan disparándose más allá de US$ 4 por galón a finales de mayo de 2022 como lo muestra la gráfica 2.
Igualmente y al revisar los precios del combustible para aviones en América del Norte, América Latina y el resto del mundo durante el conflicto entre Rusia y Ucrania, la tendencia en los precios del combustible para aviones en América del Norte y el mundo continúa aumentando, pero a un ritmo más lento, que el observado en América Latina como lo muestra la siguiente gráfica.
[rebelmouse-image 30034844 is_animated_gif=false crop_info="%7B%22image%22%3A%20%22https%3A//assets.rbl.ms/30034844/origin.jpg%22%2C%20%22thumbnails%22%3A%20%7B%22origin%22%3A%20%22https%3A//assets.rbl.ms/30034844/origin.jpg%22%2C%20%222000x1500%22%3A%20%22https%3A//www.americaeconomia.com/media-library/eyJhbGciOiJIUzI1NiIsInR5cCI6IkpXVC..." dam="1" site_id=20917490 pin_description="" original_size="857x529" expand=1] Gráfica 2. Análisis de precios y tendencia precio del crudo Brent y combustible de aviación.
Por lo general, los precios más elevados del combustible para aviones se han observado en América del Norte, seguido de Europa y otras regiones, incluida América Latina. Sin embargo, durante la mayor parte de abril de 2022 los precios en la región fueron más altos que en Europa y la tendencia continuó en mayo. Más aún, a partir del 19 de mayo, estos precios comenzaron a acercarse o superar los precios observados en América del Norte.
Ante esto surgen varias preguntas importantes. ¿Podrían las aerolíneas en América Latina aumentar las tarifas para compensar por completo el efecto de los incrementos en los costos del combustible para aviones, especialmente cuando los pasajeros suelen comprar los boletos mucho antes de su viaje? ¿Y cómo un aumento significativo y rápido en los precios del combustible puede resultar en que la tarifa facturada no cubra ese aumento?
Igualmente, ¿cómo podían las aerolíneas de la región protegerse de la volatilidad en los precios del combustible para aviones y de posibles picos en los precios a futuro?
Existen una serie de iniciativas que las aerolíneas deberían implementar para mitigar el impacto de los precios de combustible, desde la elección de la flota a operar, coberturas de combustible y los recargos por alza de combustible hasta el aumento de los factores de ocupación y el control estricto de la capacidad y oferta de asientos, entre otros.
Además, el uso de herramientas tecnológicas para optimizar la planificación de vuelos y el análisis detallado de los costos históricos pueden ayudar a reducir los costos de combustible, buscando una mayor eficiencia en el consumo del combustible utilizado.
Dado que los costos de combustible y mano de obra representan típicamente entre el 50% y el 60% del gasto anual de una aerolínea, esos dos costos entre otros deben ser el enfoque clave en la segunda mitad de 2022. Finalmente, el número de empleados a tiempo completo por aeronave para una aerolínea de bajo costo debería estar entre 36 y 45 empleados, mientras que para una aerolínea de servicio completo debería estar entre 75 y 90.
Por otro lado, en esta segunda mitad de 2022 se puede esperar una brecha en los márgenes operacionales de las aerolíneas que pueden necesitar un cambio en la estrategia de administración de ingresos a largo plazo, especialmente en los vuelos regionales e internacionales de largo alcance.
Igualmente, el crecimiento a nivel mundial y la rentabilidad adicional asociadas a las cabinas premium economy continúan superando los retornos de las cabinas de clase ejecutiva, lo cual ha abierto la puerta para replantear nuevos productos, redefinir una nueva distribución comercial y ajustar las estrategias de marketing. Inclusive, pudiesen existir oportunidades de reconfiguraciones en las cabinas de pasajeros con la intención de optimizar ingresos y márgenes sobre todo cuando se espera que los viajeros de negocios solamente regresen entre un 65% a 80% de los niveles previos a la pandemia.
Además, se espera que la segunda mitad del 2022 se observen reducciones en la oferta de asientos con la finalidad de aumentar la confiabilidad operativa debido a que la escasez de personal en tierra y aire que continúan afectando a la industria.
De esta manera, muchas aerolíneas estadounidenses continúan recortando su oferta de asientos este verano para cumplir con itinerarios más realistas que puedan ejecutar con un alto grado de confiabilidad de despacho. Pero, menos asientos y kilómetros volados se traducirán en costos por asiento kilometro aún más altos. lo que se traduciría en boletos aéreos más costosos, lo cual representa un dolor de cabeza para las aerolíneas, sobre todo cuando la inflación continúa subiendo en la mayoría de los países de la región acercando a un 10% para algunos países y otros a más del 50%.
Por lo tanto, las aerolíneas de la región continuarán navegando a través de una nueva fórmula que les permita bajar costos y optimizar ingresos mientras buscan segmentar nuevamente al mercado basado en los cambios de la demanda en la era postpandemia.
Finalmente, debemos recordar que inclusive antes de la pandemia, las aerolíneas estaban progresando más en la reducción de costos que en la optimización de las tarifas aéreas. Sin embargo, el uso de la tecnología y la digitalización son palancas clave para lograr ahorros de costos y optimizaciones de ingresos que todas las aerolíneas tanto anhelan hoy día.