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Mujer ejecutiva y madre: un derecho
Dom, 08/05/2022 - 17:35

María Laura Murua

Igualdad de género y diversidad en empresas: mucho más que palabras
María Laura Murua

Gerenta general de Genomma Lab Chile.

Hace cerca de tres meses llegué a Chile tras ser nombrada como nueva gerenta general de Genomma en Chile, lo que implicó trasladarme desde Argentina a este país con familia e hijos, preocupada de darles a ellos un entorno cómodo en un país que no es el propio. Así he debido compatibilizar el desafío de mi nuevo rol con la labor incansable de la maternidad, lo cual no ha sido un obstáculo aunque muchas veces, por supuesto, ha sido duro al no contar con redes de apoyo locales.

Afortunadamente, esto ha sido posible porque hoy existen ambientes corporativos que facilitan una adecuada compatibilidad de roles, algo que era impensado hace una década atrás.

A eso se suma lo relevante que es cambiar un paradigma cultural que se arrastra por años y que es la corresponsabilidad del hombre en los roles del hogar, los cuales tienen que ser compartidos. Debe existir ese justo balance que es fundamental para el desarrollo profesional de las mujeres que son madres. La corresponsabilidad se vuelve relevante para remediar en parte la inequidad que muchas mujeres viven no solo en su ambiente profesional sino que también a nivel doméstico.

Un factor que ha sido absolutamente beneficioso ha sido la tecnología, ya que juega a nuestro favor y permite que cada día más mujeres puedan estar conectadas tanto con el hogar como el trabajo, con las complejidades que ello implica por supuesto.

Pero si bien las compañías tienen un largo camino por recorrer, no sólo es el ámbito privado el que debe garantizar a las mujeres una completa adecuación de sus roles. También lo debe hacer el Estado. Si bien a nivel mundial actualmente existen leyes que permiten una efectiva conciliación, aun queda trabajo en los países de la región por realizar en beneficio de sano equilibrio entre la maternidad y el trabajo, y que, por supuesto, beneficie tanto a las mujeres trabajadoras como a las empresas.

Hoy se hace necesario que tanto empresas como el Estado sigan entregando a las mujeres las herramientas necesarias para alcanzar un empoderamiento absoluto para trabajar y para emprender, para lograr sus metas profesionales, porque esto es un derecho de todas, de hacer una carrera y una vida familiar al mismo tiempo, y ejercer influencia en las nuevas generaciones de liderazgos positivos sin culpa y sin descuidar el inigualable rol de ser madre.

Los tiempos actuales exigen una igualdad de condiciones en el ámbito laboral, profesional y personal, donde el empoderamiento femenino es vital para que una mujer pueda realizar sus metas y si las empresas pueden brindarle estos derechos para un equilibrio justo en ambos roles, esto repercutirá también en un crecimiento no sólo de ellas sino también una productividad optima y un desarrollo económico más eficiente.