Olivia Palermo, Karolina Kurkova o Erin Wasson adoran los "aquazzura", zapatos de tacón infinito y exquisitas pieles que aúnan confort y diseño.
El colombiano Edgardo Osorio, fundador de la marca italiana Aquazzura, dio sus primeros pasos en el mundo del calzado de la mano de prestigiosas firmas de lujo, como Salvatore Ferragamo, Sigerson Morrison, René Caovilla y Roberto Cavalli.
Tras diez años trabajando y formándose en la industria de la moda, lanzó en 2011 su propia marca de calzado de lujo, Aquazzura, una marca que las "celebrities" adoran por su elegancia y confort.
"El éxito del modelo de pitón ha sido una locura", señala el diseñador, que con apenas treinta años se lanzó a la arriesgada aventura de montar su propia marca. Pronto se dio cuenta de que existían muchos diseñadores jóvenes que hacían zapatos "raros, extraños, llamativos, recargados y ridículos", pero nadie de su edad que se dedicará a diseñar zapatos "simplemente bonitos y cómodos", señala en una entrevista con Efe.
Osorio, que mezcla una estética europea refinada con la modernidad americana y el sabor latino, puede presumir de diseñar "los zapatos con el tacón más cómodo", según cuentan la famosas. "Estoy muy orgulloso de ser colombiano, y me gusta la idea de ser latino, porque tienes otro gusto, otro aprecio, viviendo en Europa", explica Osorio, quien también muestra su interés por Italia, país en el que dio sus primeros pasos, en casas como Salvatore Ferragamo o Roberto Cavalli, y donde fundó su firma en Florencia.
A este colombiano le gusta que las famosas luzcan sus diseños, aunque le hace muy feliz que clientas anónimas pisen el asfalto con sus creaciones. "La moda no es otra cosas que un reflejo de la sociedad, porque el mundo necesita la moda para soñar", explica este prodigioso zapatero.
Convencido de que la moda es sueño y fantasía, Edgardo Osorio salió de su tierra y se instaló en Miami y Londres, ciudad en la que se formó en el London College of Fashion and Central Saint Martins. Tras cursar estudios desarrolló una horma con la que distribuye el peso corporal. "Son zapatos con un tacón de diez centímetros, más mullidos en la parte delantera y con una inclinación que permite apoyar mejor el pie en el talón", cuanta Osorio.
Ahora, Edgardo Osorio tiene una lista de espera de más de un año para conseguir sus codiciados diseños. "Me gusta la idea de un zapato ligero", explica el diseñador, quien defiende el calzado en punta, incluso para las bailarinas, y tiene en mente lanzar una línea deportiva.
Entre todos sus modelos, los más deseados son los llamados "Sexy Thing", un modelo armado en ante negro que se ajusta como un guante en el pie, realizado en piel de pitón teñida en varios colores. Aunque tiene un tacón de más de diez centímetros, son zapatos cómodos, incluso para quienes "no suelen llevar zapatos muy altos", agrega el diseñador: "soy conocido por hacer zapatos sexys y altos, pero también cómodos".
Osorio, que dice inspirarse en "la parte bonita de la vida, en la elegancia de la 'dolce vita', en la sencillez, en la naturaleza", explica que "ha conseguido una horma con la que andar doce horas", un esfuerzo y un éxito que las mujeres de todo el mundo aplauden. "Mi objetivo es que mis zapatos sean estéticamente perfectos, pero también confortables, un calzado con el que se puede caminar todo el día y bailar toda la noche", concluye.