El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, destacó que la vacuna del laboratorio Cansino es de una sola dosis, en base a adenovirus, y que tiene una eficacia para evitar los contagios de 68,8% y para prevenir cuadros graves del 95,5%.
El Gobierno de Argentina aprobó el viernes el uso de emergencia de una vacuna desarrollada por China para hacer frente a la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19), informó el Ministerio de Salud.
"La ministra de Salud, Carla Vizzotti, firmó la Resolución 2021-1671 que autoriza el uso de emergencia de la vacuna Convidecia de la empresa Cansino Biologics INC", dijo la cartera sanitaria a través de Twitter.
La agencia estatal de noticias, "Télam", dijo que la autorización contenida en la Resolución oficial se dio "de conformidad con las recomendaciones de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat)".
La Anmat resaltó el cumplimiento por parte de la vacuna de los estándares requeridos por la autoridad regulatoria de las plantas elaboradoras, el desarrollo y la elaboración de los productos, su certificación en el país de origen y el cumplimiento de los estándares de calidad, dijo "Télam".
La información oficial destacó que para dar su autorización la Anmat accedió a información sobre la seguridad y eficacia de la vacuna Convidecia, así como a información que indica que no se han presentado eventos adversos graves, ni se han identificado diferencias significativas en la eficacia observada en los diferentes grupos etarios que participaron de los ensayos clínicos.
En paralelo al anuncio del Gobierno argentino, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, destacó que la vacuna Convidecia es una vacuna de una sola dosis, de adenovirus, y que tiene una eficacia para evitar los contagios de 68,8% y para prevenir cuadros graves del 95,5%.
"Es una vacuna de una sola dosis de muy alta eficacia y seguridad", resaltó el gobernador bonaerense durante una conferencia de prensa.
La Fundación Huésped de Argentina coordinó en el país sudamericano estudios de fase III de la vacuna, que utiliza un enfoque de vector viral que toma un virus vinculado al resfrío común (adenovirus) al que se le agrega genéticamente una proteína propia de la COVID-19 para poder ser reconocido por el sistema inmunológico y, así, generar inmunidad.
La entidad destacó en un comunicado reciente que el desarrollo de Cansino contempla una vacuna de una sola dosis, que se conserva a entre 2 y 8 grados, lo que facilita la logística, y mencionó que en los estudios de fase 1 y 2 de esta vacuna participaron 616 personas voluntarias que fueron vacunadas con buenos resultados preliminares y sin efectos adversos serios.
La autorización a la vacuna Convidecia de Cansino se suma a otros permisos que Argentina otorgó previamente, entre ellas a una vacuna de los laboratorios Pfizer-BioNTech; a la vacuna rusa Sputnik V; a la vacuna de la farmacéutica británica AstraZeneca, a la vacuna Covishield del Instituto del Suero de India (SII, por sus siglas en inglés) y a la vacuna china de Sinopharm.
Argentina comenzó el 29 de diciembre a vacunar a su población contra la enfermedad y lleva aplicadas más de 16,01 millones de dosis.
El país sudamericano registró su primer caso de la COVID-19 el tres de marzo pasado y confirmó hasta el viernes 4.093.090 casos y 84.628 decesos por la enfermedad.
Las medidas de distanciamiento social, preventivo y obligatorio dispuestas por el Gobierno argentino para controlar la pandemia se extenderán hasta el 25 de junio próximo.