El vicepresidente de la entidad, Miguel Pesce, asumió la presidencia del organismo en medio de la polémica por las acciones del gobierno para sacar del cargo a Martín Redrado.
Buenos Aires. Elvicepresidente del Banco Central de Argentina, Miguel Pesce, asumió el lunes elcomando formal de la autoridad monetaria, un día después que policíasimpidieran el ingreso a su despacho del jefe de la entidad, Martín Redrado,abiertamente enfrentado al Gobierno.
Pesce llegó en la mañana del lunes a la sede del banco,custodiada por unos pocos policías, y que es objeto de una fuerte disputa queinvolucra al Gobierno, la oposición y la justicia por un plan oficial deapropiarse de parte de sus reservas internacionales para pagar deuda.
Redrado, quien según la ley es aún jefe del Banco Centraldebido a que el Congreso no se ha pronunciado sobre su remoción ordenada por lapresidenta Cristina Fernández, se opone al intento del Gobierno de utilizarreservas de la entidad para afrontar pagos de la deuda en medio de severosproblemas fiscales.
"Si hasta hoy me defendí, ahora paso al ataque. Tengolas listas específicas de los amigos del poder que compraron dólares",dijo Redrado citado el lunes por el diario Clarín, en una velada amenaza alGobierno sobre denuncias de eventuales ilícitos.
Por el impedimento policial para poder acceder a sudespacho, Redrado denunció penalmente en la tarde del domingo al jefe deGabinete, Aníbal Fernández.
La justicia, según fallos divulgados el viernes, mantienebloqueado el plan del Gobierno de usar reservas de la autoridad monetaria yratificó que para remover a Redrado de la presidencia del banco, como dispusoFernández, es necesaria la intervención del Congreso.
Pero el Gobierno, al tiempo que descalificó el fallojudicial, dijo que Redrado ya no podía volver a conducir la autoridadmonetaria. Esa opinión es compartida por gran parte de la oposición, que buscóbloquear el uso de las reservas pero sin defender decididamente al presidentedel Banco Central.
"Los dos fallos que se sacaron el viernes sonhorrendos", dijo en la noche del domingo Néstor Kirchner, antecesor,esposo y asesor informal de la presidenta Fernández.
Kirchner, en declaraciones a la televisión estatal, dijo queexiste una conspiración organizada por el mayor grupo de medios del país, elconglomerado Clarín; el vicepresidente devenido en opositor, Julio Cobos, y lajusticia, a la que se refirió como "el Partido Judicial", paradebilitar al Gobierno de su esposa.
"El fallo es muy claro y no me revoca en el cargo. Elpresidente del Banco Central sigo siendo yo", dijo por su parte Redrado,quien afirmó además que aguarda la convocatoria de una comisión del Congresoque debe tratar su remoción.