Reediciones de libros sobre el artista y trabajos musicales de raíces diversas, como folklore y jazz, con sus creaciones marcan un intenso reconocimiento a la obra del compositor.
En los últimos tiempos se han multiplicado las manifestaciones relacionadas con el arte de Luis Alberto Spinetta (1950-2012): se reeditó su libro de poemas "Guitarra Negra", existen proyectos de CDs que lo ligan al jazz y al folklore y, por si fuera poco, este viernes se celebra en Argentina el Día Nacional del Músico en su homenaje.
Por primera vez se celebra, por ley, el Día Nacional del Músico en conmemoración del natalicio de “el Flaco”, que si no le veía el aura a las personas, les encontraba acordes y armonías, ya que, como lo dijo en una de sus canciones, “toda las cosas tienen música”.
Un lugar especial tienen las reediciones en los últimos meses de los libros Spinetta: "Crónica e iluminaciones", del Eduardo Berti, y "Martropía: conversaciones con Spinetta", de Juan Carlos Diez, y el último de los números especiales de la revista "Sudestada" dedicada al autor de "Muchacha ojos de papel".
Uno de los directores de la publicación, el periodista Ignacio Portela, subraya que el músico "era muy reservado. Pocas veces trascendió su vida privada a los medios. Cuidaba su imagen, su carrera; no mezclaba la banalidad con su obra"
- ¿Ves un Spinetta inagotable en sus búsquedas estéticas, al mismo tiempo que extremadamente riguroso con su trabajo?
- Nuestra generación, la que está llegando a los 40, desde que tenemos conciencia suena en nuestras casas la música de Luis. Con el tiempo, vimos las variaciones musicales en sus distintas etapas estéticas y exploramos sus comienzos. Hay algo muy frecuente en la obra de Spinetta: la idea de buscar la pureza en sus poesías y en su música, como quien busca la esencia de un color, de un abrazo, del viento.
- Es poco conocido que Spinetta musicalizó un poema de Rafael Alberti que grabó la nieta del español, Isabel de Sebastián.
- Isabel arrancó su carrera con las Bay Biscuits junto a Fabiana Cantilo y terminó grabando voces en el disco Privé de Spinetta. Se hicieron amigos en esa época y ella le mostró algunos textos de su abuelo Alberti; ahí nació “Canción del ángel sin suerte”.
- Una de las notas de "Sudestada" se dedica a Spinetta y el jazz; ¿su música tiene toques jazzeros?
- Sí, las melodías de gran parte de su obra están atravesadas por un sonido jazzero, sobre todo la etapa de “Invisible” y “Spinetta Jade”. Los arreglos, los teclados, sus solos de guitarra. A pesar de reconocer la gran influencia Beatle es imposible no pensar en un Spinetta jazzero. En los repertorios actuales de músicos de jazz su obra siempre está.