Desde hace semanas que el país latinoamericano atravisa escacez de combustible. Con el objetivo de terminar con ese problema, que provocó incluso graves inconvenientes al sector de agricultura, la administración de Alberto Fernandez creó el Régimen de Incentivos al Abastecimiento Interno de Combustibles.
El gobierno argentino anunció este jueves la creación de un Régimen de Incentivos al Abastecimiento Interno de Combustibles (RIAIC) para las empresas refinadoras que importen gasoil (diésel) con el fin de evitar la falta de ese combustible, que afecta al país desde hace semanas.
En medio de un déficit energético que afecta la balanza argentina, el gobierno hizo referencia en un decreto a la crisis a la situación energética global y a la "insuficiencia estructural de la capacidad refinadora local para abastecer una demanda creciente, tanto industrial como del parque automotor".
"Es necesario impulsar medidas para garantizar el abastecimiento incremental y la compensación de costos extraordinarios ante el contexto internacional y una demanda creciente, producto de la recuperación de la economía argentina", indica el texto del decreto.
La medida, que entra en vigencia este jueves, establece que las empresas que adhieran al régimen podrán solicitar un monto equivalente a la suma que deban pagar en concepto de Impuestos sobre los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono, por las importaciones de gasoil.
En el caso de las refinadoras integradas, se agregará a ese importe un monto adicional.
"La compleja situación energética global ha generado una creciente escalada de precios internacionales afectando la asequibilidad de los recursos energéticos, especialmente en los países en desarrollo", indicó el texto del decreto.
"Esta dinámica de precios ha repercutido con mayor intensidad en algunos países de la región, cuya dependencia estructural de combustibles importados los expone en mayor magnitud a los cambios en los precios internacionales", agregó.