Un grupo de estudiantes y un cirujano trabajaron en conjunto en la institución y lograron extirparle un tumor a una paciente sin sacarle el pulmón.
Télam. En la misma oficina luminosa que usó René Favaloro durante 25 años en la Fundación de la avenida Belgrano, un grupo de estudiantes y cirujanos presentó su último logro: imprimieron 3D y a tamaño real el árbol bronquial de una paciente que tenía un tumor, la operaron y, gracias a una intervención más predecible, evitaron extirparle el órgano.
Lucas Mey (23) y Santiago Birkner de Miguel (21), dos estudiantes Ingeniería Biomédica de la Universidad Favaloro, y Matías Biancucci (23), un ex estudiante, llamaron al jefe de Transplantes del Hospital, Alejandro Bertolotti, para contarle que trabajaban desde hace meses en modelos de impresión 3D que, creían, podían usarse para mejorar las intervenciones.
“Menos mal que les contesté ese email. A veces, en el apuro del día a día, uno deja pasar estas oportunidades. Y lo activamos rápido”, cuenta el cirujano sobre cómo se inició el modelo de trabajo conjunto entre el hospital y la universidad, una sinergia bastante habitual.
La impresora –adaptada por ellos en función de sus necesidades y nacional- funciona en una habitación de la casa de Santiago, eso les permite “tenerla bajo control” durante las largas horas de impresión.
Entre risas, ellos dicen que es su forma de homenajear al mítico garaje de Silicon Valley, la cuna de la tecnología moderna. Y pasaron de ser amigos a socios: bautizaron su emprendimiento con la marca MIRAI.
Bertolotti les envió las imágenes de la tomografía y, tras estudiarlas, lograron imprimir el modelo del bronquio en aproximadamente dos horas. El material que usaron es PLA y ABS, dos plásticos industriales de uso corriente.
“Entré al quirófano con una estrategia ya implementada, hacer una adecuada resección del tumor y reconstruir lo necesario sin comprometer al pulmón sano”, contó Bertolotti y advirtió que el modelo de plástico que fabricó el grupo de estudiantes desmintió varios “preconceptos” que tenía sobre la forma del tumor y que fue eso lo que le permitió salvarle el pulmón a la paciente. Además, explicó que si se logra extender la técnica, se disminuirán los riesgos y los tiempos quirúrgicos en beneficio del paciente.