Gracias a la existencia de importantes receptores, los animales hogareños resultan muy sensibles para ser tratados con medicina alternativa, especialmente la aromaterapia que resulta efectiva en problemas conductuales.
El perro anteriormente era considerado el mejor amigo del hombre. Hoy, en muchos casos, es un miembro más de la familia. Por ello, médicos veterinarios en Guanajuato trabajan en el desarrollo de técnicas de atención alternativas, de manera de ofrecerles tratamientos integrales a sus dolencias.
“Hoy el perro no es el perro de la casa, se ha cambiado ese concepto; hoy ya pasó de ser la mascota a parte integral de la familia. Mucha gente lo considera como un hijo más de la familia”, dice el veterinario Aníbal Lozano.
En su centro se desarrollan técnicas que ayudan a las mascotas a relajarse a través aromaterapia, por ejemplo, principalmente para atender a las mascotas que tienen problemas de conducta.
"Necesitamos de una serie de terapias conductuales y hoy la medicina alternativa tiene algunas opciones, sobre en la aromaterapia. En el caso de los perros, se encuentran tapizados de una gran cantidad de receptores que son muy sensibles a estos aromas y responden mejor a este tipo acciones y se empiezan a relajar”, explicó el veterinario.
Incluso los especialistas recomiendan sesiones de masaje para tranquilizar a los mascotas, reconociendo que estas formas de atenderlos es parte de una nueva cultura en el cuidado de las mascotas.
“Hay un pequeño grupo que cada vez más veterinarios están integrando a tener una opción más para las terapias médicas, en las cuales hemos visto que sí hemos tenido algunos resultados. No te puedo decir que del 100% de los casos, y que funcionan al 100%, pero cada vez es más la experiencia de compañeros de nosotros en cuanto a la utilización de este tipo de alternativas”, expuso el especialista.
Para los terapeutas físicos, esta nueva aplicación de masajes es útil y necesaria para que los perros se relajen en casa.
“Estas nuevas formas de cuidado de la mascota resultan muy útiles, porque logramos objetivos y una comunicación afectiva y física en donde ellos se relajan y descansan del estrés que pueden estar viviendo”, explica la terapeuta Luz J. González.