Si piensas que el 5G es solo una cosa de velocidad, estás equivocado. No es un error colosal, pero sí una lectura muy pobre de un avance que marcará un salto cualitativo en tu vida o la de tus hijos.
Por Cecilia Vega para ThinkBig. 1.126 personas perdieron la vida en las carreteras españolas en 2015. 1.131 en 2014. ¿Es posible evitar estas cifras? Parece que sí. En unas décadas, la mortalidad por accidentes de tráfico puede ser cosa del pasado. Y no será porque mejore el estado de las carreteras o porque nos vayamos a volver más prudentes o mejores conductores. Será gracias al 5G, o hablando con precisión, al aprovechamiento de la infraestructura de conexión de quinta generación en el desarrollo de coches autónomos o sin conductor.
Tras varias pruebas fuera de nuestras fronteras, el pasado 23 de noviembre un vehículo, con piloto automático, recorría los 599 km que separan Vigo de Madrid. La experiencia, posible gracias a un cambio de regulación de la DGT, fue un éxito. Los sensores, las cámaras y radares en el exterior del coche, junto a las pantallas digitales y un complejo sistema tecnológico en el interior, cumplieron a la perfección su cometido. ¿Para qué es necesaria entonces la tecnología 5G?. Su latencia mínima es la clave.
1. TU CARRO CONDUCIRÁ POR TI
Las redes inalámbricas 5G serán muy rápidas -velocidad real superior a 1Gbps, hasta 10 Gbps en escenarios óptimos-, pero la característica realmente importante en una conducción 100% automatizada no es la velocidad sino la baja latencia, entendido este término como el tiempo que tardan dos dispositivos en responderse. En el mejor de los casos, con el 4G, la tasa de latencia es de alrededor de 50 milisegundos, pero la tecnología 5G la reducirá aproximadamente a un milisegundo. Puede no parecer mucho, pero imagina que vas a bordo de un coche y aparece un obstáculo en la carretera. La diferencia entre comenzar a frenar en 1 ms o hacerlo en 50 ms, puede ser la diferencia entre la vida y la muerte.
El coche que compres dentro de 10 años podrá detectar si existe riesgo de colisión, recibir información de otros vehículos o incluso de los peatones, descargar en tiempo real el tráfico cercano y elegir la ruta más apropiada para evitar atascos y accidentes. Por tanto, recopilar y transmitir en tiempo real tal cantidad de gigas de información será otro de los retos de las redes 5G del futuro. Si como yo, eres de los que no soporta conducir, esperarás con ansia el momento de poder dormir o leer un libro durante los trayectos.
2. POR FIN HABRÁ WI-FI EN EL TREN O EN EL AVIÓN
¿Porqué es prácticamente imposible conectarse al Wi-Fi en el autobús? Supongo que tú alguna vez te habrás preguntado lo mismo o, si viajas en AVE te habrás quejado de los cortes continuos de tu conexión a través de la red móvil. La buena noticia es que Renfe se ha comprometido a implantar Wi-Fi de calidad en el AVE y en las estaciones de Cercanías de la mano de Telefónica. Y ¿en el avión? Iberia ofrece conexión a Internet, de pago, en sus aviones de largo radio desde julio de 2014 y en marzo de 2015 Vueling y Telefónica presentaron su servicio de conexión de banda ancha a bordo. En el mundo, son apenas 40 aerolíneas las que ofrecen conexión Wi-Fi y, casi todas, con grandes incovenientes en el uso y la navegación.
Con las redes 5G no sólo se acabarán las desconexiones puntuales al cambiar de antena mientras nos desplazamos, sino que parece que podremos conectarnos sin problemas y a gran velocidad en trenes o aviones, dejando a un lado las limitaciones de ancho de banda que presentan las redes actuales.
3. VIAJARÁS POR EL MUNDO SUBIDO A UN VIDEO 360 GRADOS
Con las redes 5G cambiará tu forma de trabajar y de divertirte. Olvídate de las interrupciones y disfruta de tus vídeos en tiempo real y con calidad óptima. Piensa en aplicaciones de streaming como Periscope, en videoconferencias sin interferencias, en “viajar” a cualquier parte del mundo a través de vídeos 360 grados, pero también en la posibilidad de emitir y recibir vídeo de alta definición en lugares con grandes aglomeraciones de gente, como un estadio, sin que la red se sature.
4. UN ROBOT CIRUJANO TE OPERARÁ
¿¡Cómo!? Vale, no será un robot cirujano exactamente, sino un robot que replicará en tiempo real los movimientos que efectúe un cirujano desde cualquier parte del mundo. Este podría ser uno de los usos más llamativos del 5G, el de interactuar a distancia con máquinas en tiempo real, y es posible gracias a uno de los puntos fuertes de esta tecnología, su baja latencia.
5. PODRÁS VIVIR EN BARCELONA Y TRABAJAR EN SUECIA
Si lo del quirófano no te convence, imagina entonces la posibilidad de ponerte a los mandos de una excavadora virtual en Barcelona, mientras la excavadora real opera a miles de kilómetros, por ejemplo en Suecia. Una nueva forma de teletrabajo, una experiencia similar a un videojuego, posible de nuevo gracias a la mínima latencia del 5G que permite replicar movimientos sin el retraso que se da con las redes actuales 3G y 4G.
6. TU ROPA VIGILARÁ TU SALUD
Si algo ha quedado claro en la última edición de CES, la feria tecnológica de referencia que acaba de celebrarse en Las Vegas, es que ninguna empresa quiere dejar pasar el tren de los wearables o prendas inteligentes: pulseras para fitness, cinturones que te dicen si te has pasado con la comida, zapatos que cuentan calorías quemadas e incluso una pulsera que alivia las náuseas del embarazo. La oferta de wearables crece a pasos agigantados, pero no será hasta la llegada del 5G cuando veamos realmente si estos inventos son útiles o son un timo. Gracias al aumento del ancho de banda y a la mejora de las conexiones, esta “tecnología vestible” podría, por ejemplo, captar tus constantes vitales y transmitirlas en tiempo real a tu móvil o al de tu médico.
7. TU CIUDAD SERÁ MÁS INTELIGENTE
Sensores en los contenedores, en los semáforos, en los pasos de peatones, en las alcantarillas,… Se espera que en los próximos años, nuestras ciudades, nuestros edificios y nuestras casas, se llenen de dispositivos capaces de medir, entre otras parámetros, el nivel del tráfico, de contaminación atmosférica o de basura. Tu frigorífico será quien te diga si tienes que comprar leche. Al igual que ocurre con los wearables, la proliferación de esta tecnología requerirá de un ancho de banda más amplio que el de las redes móviles actuales. Solo así nuestra ciudad inteligente será una ciudad eficiente y mejorará nuestro nivel de vida y confort.
8. SERÁS MÁS EFICIENTE EN TU TRABAJO
Las redes 5G, en combinación con el desarrollo del Big Data y el Cloud Computing, supondrán un gran salto en la inteligencia de negocio. En unos años podrás acceder en cualquier momento y lugar a cantidades ingentes de información, captada y transmitida por millones de objetos conectados y almacenada en la nube. El tiempo y el espacio no serán límites en el nuevo escenario empresarial. La nueva infraestructura de redes inalámbricas, con su ancho de banda y características de fiabilidad, velocidad y latencia, cambiará tu manera de trabajar y te ayudará a ser más eficiente y obtener mejores resultados en tu trabajo.
9. UN DRON TE TRAERÁ LA PIZZA
¿Te imaginas pedir una pizza y que te la traiga un dron? Quizá pronto se haga realidad… Actualmente estas aeronaves no tripuladas no pueden recorrer grandes distancias, pero con la llegada del 5G los límites se difuminarán y podremos utilizar los drones para muchas tareas. Por el momento, empresas como Amazon ya está probando su futurista sistema de reparto en EEUU y afirma que en unos años ver estos drones sobrevolar nuestras cabezas será tan normal como ver hoy los camiones de reparto en nuestras carreteras.
OBJETIVO 2020
¿Y para cuándo todo esto? Todos los cálculos apuntan a que el 5G comenzará a funcionar en 2020 aunque antes, en 2018 y coincidiendo con los Juegos Olímpicos de Invierno de Corea del Sur y el Mundial de Fútbol de Rusia, esta tecnología se enfrentará a dos importantes pruebas de fuego.
Hasta entonces, se seguirá trabajando en la definición de esta nueva generación, tarea en la que empresas como Telefónica están volcadas desde hace años. La empresa española de telecomunicaciones, ha suscrito recientemente un acuerdo de colaboración con el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, la Consejería de Educación, Juventud y Deporte de la Comunidad de Madrid, IMDEA Networks, Ericsson y AMETIC (Asociación de Empresas de Electrónica, Tecnologías de la Información, Telecomunicaciones y Contenidos Digitales) para apoyar el desarrollo de las tecnologías, productos y servicios 5G.
Confiemos en que las trabas burocráticas y en torno a la gestión de frecuencias del espectro radioeléctrico no retrasen la llegada a España de esta revolucionaria tecnología. Una revolución que, queda claro, trasciende tu teléfono móvil. El 5G no está pensando para que volemos con nuestro Smartphone o para que descarguemos una película en unos segundos (aunque también haremos eso). El reto de esta red en ser capaz de proporcionar servicio al Internet de las Cosas (Internet of Things o IoT) que multiplicará el número de dispositivos conectados de aquí a unos años. 25.000 millones, estima ITU en su informe Trens in Telecommunications Reforms 2015. Más del triple de la población mundial prevista por la ONU para ese año.
