El sostenido crecimiento de la compañía y su éxito en el campo de la publicidad online y la innovación han levantado considerablemente las acciones sobre los US$800. ¿Podrá Google llegar a la cima de las empresas tecnológicas?
Análisis de Andrés Cardenal, para Sala de Inversión.
Tras marcar nuevos máximos históricos y consolidarse por encima de la zona psicológicamente representativa de los US$800, las acciones de Google se han convertido en una de las que más atención reciben por parte de analistas e inversores durante los últimos meses. En este contexto, varios especialistas de Wall Street han publicado estimaciones que las sitúan en valores cercanos a los US$1.000.
En general, resulta recomendable interpretar estos pronósticos con bastante cautela, especialmente cuando existe un optimismo generalizado sobre una empresa como sucede en el caso del buscador online en la actualidad, ya que esto puede generar una mirada demasiado complaciente.
Además, es importante tener en cuenta que las estimaciones de valor no son otra cosa que cálculos probabilísticos sobre cuál podría ser un valor razonable para las acciones en base a sus ganancias y variables similares, por lo que están lejos de representar un pronóstico certero.
En base a la performance financiera de la empresa y sus posibilidades de crecimiento, un valor objetivo de US$1.000 no resulta para nada exagerado ni imposible de alcanzar para una compañía con la calidad y las oportunidades de crecimiento de Google.
En la actualidad, obtiene la mayor parte de sus ganancias en el negocio de publicidad online, mercado en el cual cuenta con una posición dominante gracias al tráfico que genera su servicio de buscador online.
La empresa cuenta con una participación cercana al 67% en los Estados Unidos en este rubro y, además, brinda una amplia gama de servicios de todo tipo que representan oportunidades de crecimiento muy atractivas en el mediano plazo.
A medida que crece la utilización de dispositivos móviles, Google se encuentra en una posición de privilegio para capitalizar esta tendencia. Su sistema operativo Android está instalado en el 75% de los smartphones utilizados a escala global y, en los últimos meses, ha estado ganando terreno en el rubro de las tabletas.
Incluso en los dispositivos Apple (AAPL) que funcionan con el sistema operativo propio de la empresa creada por Steve Jobs, Google produce muchas de las aplicaciones más populares y utilizadas como Gmail, Maps y YouTube entre otras.
De hecho, debido a que los usuarios de Iphone y Ipad usan con mayor frecuencia los dispositivos y, en general, tienen un perfil de gastos más elevado, se estima que Google gana más dinero con ellos que en los smartphones que tienen Android.
En publicidad online, la compañía es el líder indiscutido y todo parecería indicar que la revolución de la computación móvil no va a hacer otra cosa que fortalecerla aún más frente a sus competidores. Además, ha demostrado una capacidad de innovación poco habitual para firmas de semejante tamaño.
Proyectos como los anteojos de realidad aumentada, Google Glases, o las tecnologías de automóviles que se conducen de manera completamente automática han asombrado tanto a analistas de la industria como a consumidores de tecnología.
Si bien es temprano para analizar la viabilidad comercial de esos desarrollos, no puede negarse que podrían tener un potencial verdaderamente explosivo en caso de resultar exitosos desde el punto de vista económico.
En cuanto a otras áreas de negocios, las tecnologías podrían parecer menos extraordinarias, pero las oportunidades de negocio son más tangibles. Google Docs presenta una alternativa eficiente y de bajo costo en cuanto a software de productividad para empresas, y YouTube no sólo ha estado creciendo fuertemente en cuanto a ingresos por publicidad, sino que se encuentra además experimentando la posibilidad de incluir contenidos pagos en la plataforma de videos más visitada del planeta.
Estos son sólo algunas de las áreas en las cuales la empresa podría expandirse en los próximos años, y dejan en claro que Google además de ser el líder indiscutido en su negocio principal mantiene una capacidad de innovación que la convierte en una compañía muy dinámica.
En cuanto a la valuación de sus acciones, cotizan a un ratio precio/ganancias (P/E) cercano a las 15,40 veces los resultados estimados para el próximo año, lo que resulta bastante moderado para una compañía con alto potencial de crecimiento.
Un valor estimado de US$1000 por papes implicaría un P/E de menos de 19 veces para el próximo año, un nivel que estaría en línea con la valuación otros activos del sector. De cualquier forma, se recomienda la colocación de un stop loss en caso de caídas por debajo de los 750.