Ambas compañías compartirán infraestructura de telecomunicaciones para entregar conectividad 4G en las ciudades sede de la Copa del Mundo.

América Móvil, y la española Telefónica se unirán a la cobertura del Campeonato Mundial de Futbol Brasil 2014, para lo cual llegaron a un acuerdo de intención cuyo objetivo es compartir sus redes en ese país sudamericano, como parte de una estrategia impulsada por el gobierno local para dar al evento deportivo el mayor nivel de conectividad posible.

Negociado largamente por ambas empresas, el convenio debe ser aprobado por Anatel, la autoridad que regula el segmento de las telecomunicaciones en Brasil, y obliga a las dos mayores operadoras de telefonía móvil de América Latina a lanzar los servicios de red Long Term Evolution (LTE), tecnología mejor conocida como 4G, durante la primavera de este año en las ciudades donde tendrán lugar los encuentros deportivos de la Copa Confederaciones.

Además, para el año próximo, este servicio, que permite conectividad de banda ancha, deberá estar en funciones en todas las ciudades que serán sede de los partidos del Campeonato Mundial de Futbol en ese país.

Según cifras de Anatel, el servicio de Vivo, nombre que lleva la filial de la operadora española, tenía a finales de enero 75.8  millones de usuarios y una cuota de mercado de 28.91%, cifras que lo ubican en el primer lugar del segmento de la telefonía móvil.

En tanto, la filial de América Móvil en el país sudamericano, que lleva el nombre de Claro, ocupa el tercer sitio con 65.5 millones de usuarios, que representan una cuota de mercado de 25%.

La alianza en Brasil es un paso estratégico para ambas empresas ya que se trata del mayor mercado de América Latina, con 262.26 millones de conexiones de telefonía móvil.

Las alianzas entre firmas rivales de telecomunicaciones no son nuevas; Telefónica tiene acuerdos similares con operadoras como Vodafone, en Reino Unido.

Éstos le permitirán compartir 18.500 antenas de radiocomunicación con las que cubrirán 98% de la población en 2015.

También en 2012 firmó un acuerdo con la mexicana Iusacell para compartir redes en México, con el objetivo de beneficiar a 27 millones de usuarios.