Dentro de la experiencia, los voluntarios reciclaron durante 6 meses todo el oxígeno, agua y parte de los alimentos, que consumieron dentro de una pequeña cápsula.

Cuatro voluntarios chinos concluyeron esta semana su estancia de 180 días en una cápsula espacial sellada en la ciudad de Shenzhen, sur de China, en la que se probó tecnología para exploración espacial.

El jefe técnico del proyecto, Li Yinghui, dijo que el experimento fue "un éxito completo". Dentro de este proyecto, los voluntarios cultivaron 25 tipos de plantas y pusieron a prueba 635 piezas de equipo.

Uno de los experimentos consistió en reciclar todo el oxígeno y agua en la cápsula y parte de los alimentos para los cuatro voluntarios. Otro, en el que se realizaron pruebas de nutrición, higiene, trabajo y descanso en el espacio, también fue concluido.

Asimismo, en el proyecto se analizaron los efectos psicológicos de un ambiente hermético y los cambios en los ritmos biológicos.

Los voluntarios, tres hombres y una mujer, fueron seleccionados de entre 2.110 candidatos después de que el Centro de Astronautas de China lanzara una convocatoria para voluntarios en mayo del año pasado. Ellos vivieron en los 180 días pasados en una cápsula sellada de 1.340 metros cúbicos con una superficie de 370 metros cuadrados.

El éxito del proyecto ha abierto nuevas áreas en tecnología de apoyo a la vida para bases extraterrestres, dijo Li.