La región se ha transformado en un nuevo foco de inversión en desarrollo para la modernización de la banca. De poco se suman grandes proyectos y empresas dispuestas a entregar este tipo de tecnología, pero ¿qué pasa con la seguridad de las transacciones? ¿Son confiables? Y, ¿será la solución para la falta de bancarización en la región?
Según 4G Americas, durante el primer trimestre de este año se registraron 618 millones de conexiones, lo que define un panorama mucho más estable a la hora de aprovechar el acceso a conectividad en la región.
Entre las herramientas que han nacido en vista de este crecimiento está la banca móvil. Pero, ¿qué es la banca móvil? Es un nuevo canal que ha salido al público en búsqueda de satisfacer necesidades de quienes no están bancarizados. Entre los beneficios asociados están los servicios de consulta, preguntar por saldos, el estado de las cuentas de los servicios básicos, etcétera.
Para hacer efectivo este canal se debe considerar que hay un tema de educación financiera pendiente e incluir capacitación para seguir creciendo en esta área. Este es uno de los motivos por los que se realiza la Cumbre Anual de Seguridad Bancaria Celaes, una conferencia de Felaban organizada por Fiba en Miami, que en su versión XXVII, trató uno de los retos más complejos de la banca móvil: la seguridad en el uso de esta herramienta.
La posición de los bancos
La Federación Latinoamericana de Bancos (Felaban), institución sin fines de lucro que agrupa a más de 500 bancos y organismos financieros en la región, asegura que las instituciones de la industria están trabajando e invierten para ofrecer flexibilidad y eficacia a sus clientes que quieren ingresar a la banca móvil. Es por eso que Felaban quiso reforzar ese discurso a través de su participación en Cumbre Anual de Seguridad Bancaria Celeas. “La penetración móvil en América Latina creció a un ritmo sorprendente en los últimos años, y la banca también debe estar a la vanguardia con estas tendencias para brindar servicios eficientes a nuestros clientes”, así lo explicó a AETecno Giorgio Trettenero, Secretario General de FELABAN.
“La seguridad bancaria no es un gasto para las instituciones, es una fuente que suma valor y que contribuye al avance de la banca y al alcance de los objetivos de negocio... Es por eso que nuestra industria continúa innovando para garantizar que las gestiones financieras en línea sean tanto, o más seguras que las del mundo real”, enfatiza Trettenero.
Para ejemplificar sobre ese punto, el Secretario General de Felaban, señaló que México es un ejemplo a seguir en materia de regulación: “En América Latina ya hay ejemplos, en el caso de México se está apuntando hacia una banca móvil exigente y protegida, algo que para algunos es exagerado, pero es bastante seguro. Ese servicio funciona vía teléfono, por fases, por tamaño, es muy sencilla y muy fácil de aplicar. Hacía allá debemos ir”, cuenta.
Y no es menor recalcar todas las condiciones y exigencias para usar esta herramienta, ya que en el caso mexicano, era una necesidad, después de los últimos resultados que la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios Financieros (Condusef) obtuvo en el 2011: los fraudes financieros representaron cerca de 476 millones de pesos (US$37 millones).
Usuarios desconfiados
Hoy el 80% de los riesgos en la banca latinoaméricana son informáticos. Es aquí donde la banca móvil se somete al prejuicio. Según la Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI), el 47% de las personas que no usan servicios bancarios en línea se abstienen porque no creen que sea lo suficientemente seguro. ¿A qué se debe esta conducta? Giorgio Trettenero, Secretario General de Felaban, asegura que la llegada de la banca móvil a más usuarios depende de que la necesidad de educar nazca desde las empresas que lideren estos proyectos. “La seguridad actual y futura requiere acciones cada vez más efectivas, es por eso que la inversión en esta área es una necesidad. Debemos mantenernos informados. Todo esto es la base de la seguridad, sumado a la experiencia de otros usuarios”, asegura Trettenero.
En la misma línea, Ruben Osta, Director General de Visa en Brasil indica que si bien hay un miedo a enfrentar esta herramienta, la gente se está sumando: “Los consumidores y las empresas están cada vez más conscientes de la eficiencia, fiabilidad y utilidad de la moneda digital en comparación con otros medios de pago”, explica.
El contexto
La región estaría preparada para la banca móvil, no sólo por una necesidad de abrir nuevas herramientas en los usuarios que no están bancarizados o no disponen de tarjeta de crédito (sólo el 13% de los usuarios en la región tienen una). De acuerdo al estudio de comercio electrónico en América Latina 2012, encargado por Visa y realizado por AméricaEconomía Intelligence, el crecimiento en el área de adaptación de tecnología ha crecido en un 113% en sólo dos años. Este indicador representa los volúmenes de compra y penetración de banda ancha móvil.
Pero aún hay más razones. Según Carolina Forero, Directora de eCommerce de VISA Latinoamérica, existe una necesidad evidente que los usuarios siguen creciendo en conocimiento digital. Pero aún hay mucho trabajo por hacer, ya que uno de los grandes objetivos es aumento el porcentaje de eCommerce que se realiza a través de dispositivos móviles en la región, que actualmente sólo llega a 3% en total.
Por otro lado, la ejecutiva sí reconoce que los smartphone, si bien están siempre en el bolsillo de los potenciales usuarios de servicios móvil, cree que aún son un poco incómodos para realizar labores de compra, contratación, comparación de precios, y cualquier tipo de transacción.
El crecimiento del servicio y sus proyecciones
La banca móvil tiene un abanico de opciones. Hay servicios de consulta a través del teléfono, se pueden realizar transacciones y consultar por estado de cuentas de diversos servicios. Desde Felaban proponen que esta herramienta vaya más allá, como hacer transferencias y abrir cuentas con sistemas de ahorro.
Pero más allá del objetivo, están las condiciones de implementación: el rol de los reguladores, el cobro de impuestos y capacidad de endeudamiento. “Para demostrar que vamos por el buen camino es que hemos trabajado con los reguladores, de hecho, hay un secretario encargado de esa área a nivel latinoaméricano y hemos mantenido reuniones constantes, para exigir regulación de una forma sólida a nivel regional. Ese sería el primer factor para llegar al éxito en ésta área”, recalca el . “Ojalá el tema de las tazas de interés quede libre de mercado, para que puedan realizar transacciones sin preocupaciones. Porque si quieres bancarizar a alguien que tenga baja renta, debes preocuparte de los impuestos y de la capacidad de endeudamiento”.
El 2015, según La Federación Latinoamericana de Bancos, será el año clave en el que se podrá evidenciar el verdadero crecimiento de la Banca Móvil. Hasta entonces lo caminos, según los especialista nombrados, son el de entregar información de los servicios, precios, beneficios y sobre todo quitar uno de los más grandes miedo: sufrir un fraude a través de esta herramienta.